Antes de proseguir con mi relato del viaje quiero agradecer a Zanna la ayuda y la amabilidad con la que ha “aguantado” mis preguntas. De bien nacido es ser agradecido.
Pues volamos el jueves 22 de octubre hacia Munich y allí alquilamos un coche. Siempre utilizamos Munich como base cuando vamos a Alpes por la economía de los pasajes y la relativa cercanía a cualquier estación de Austria o incluso Dolomitas. Una vez allí y tras un agradable viaje por carretera viendo ya atisbos de nieve en los picos más altos gracias a la gran nevada de la semana anterior, llegamos a Huben.
Huben es una pequeña aldea situada entre Längenfeld y Sölden, a unos escasos 15 minutos de Sölden. Allí nos alojamos en un garni/granja/casa rural con una relación calidad/precio inmejorable y con una propietaria amabilísima como suele ser habitual por estos lares.
Estas son las vistas desde la casa:
Aún no siendo para la Copa del Mundo, esta ubicación puede ser perfecta como base para esquiar en Sölden en invierno. No es un pueblo con vida, pero hemos de recordar que a las 18:00h aquí cierran todo y ni en Längenfled ni en el propio Sölden hay mucho más que hacer que en esta aldea después de esa hora excepto tomar algo y cenar en los pocos bares o restaurantes que dejan abiertos.
Una vez acomodados, cogemos el coche y nos dirigimos a Sölden para gestionar los forfaits, alquileres de equipos, conocer el pueblo y ubicarnos para el dia siguiente.
Al llegar al pueblo vemos menos ambiente del esperado pero empezamos a ver una horda de Audis de los equipos circulando, aparcados en los hoteles, encima de la aceras, por todos lados en definitiva. Hay que reconocer que Audi hace una campaña espectacular en el circo de la copa del mundo. En más de un concesionario no se ven tantos Audis como hemos visto durante esos días en Sölden.
Tras la primera impresión a la llegada a Sölden, vamos a buscar aparcamiento y caminando por la calle principal vemos a un grupo de chicos vestidos iguales. Cuando me fijo, son del equipo noruego y distingo a Henrik Kristoffersen y a Kjetil Jansrud entre ellos que salen a dar un paseo y a tomarse algo como tal cosa. No eran dioses?. Pues parece que no, son gente normal que salen a la calle a dar una vuelta como amigos.
Cuando nos recuperamos del shock, nos dirigimos a la oficina de acreditaciones, bienvenida e información de Sölden situado en el centro del pueblo. En esos momentos se estaba llevando a cabo un foro de esquí alpino y cuando estaba esperando en información veo que mi mujer está con los ojos como platos mirando una chica. Pues señores, Linsey Vonn a menos de 1 metro de mi!. Si consigo ver a Ted Ligety ya me puedo volver a España.
Durante el resto de la tarde y de los días que allí estuvimos nos cruzamos y compartimos remontes con muchos corredores y corredoras. Mi conocimiento de ellos se limita al top 10 ó top 20 de cada especialidad por lo que a muchos no los conocía y menos vestidos “de paisano”, pero tengo que decir que me ha sorprendido la normalidad con la que viven los fines de semana de carreras. Siempre pensé que se comportarían como los futbolistas, en plan estrellitas intocables, pero nada más lejos de la realidad.
Para terminar el jueves, compramos los forfaits para el dia siguiente y alquilamos los esquís. A las 18:00h todo absolutamente cerrado (incluso bares) y las calles desiertas. Nos decepcionó un poco la verdad la falta de ambiente del jueves, pero se compensa con que los corredores están más relajados en todos los sitios al no verse tan observados y se dejan ver mucho mas que durante el fin de semana.
Por fin llega el viernes. Nos levantamos temprano y tras un desayuno espectacular que nos ofrece nuestra casera nos dirigimos al glaciar. Hay un servicio muy bueno de autobuses, pero si madrugas hay sitio de sobra en el propio glaciar a pie de pistas y más el viernes previo a las carreras. Para subir al glaciar hay un peaje que cuesta 18€ por coche, pero en el caso de que tengas un forfait válido para el dia o las entradas para la Copa del Mundo no hay que pagar.
Nos encontramos un día despejado, soleado y sin nada de viento. Vemos nieve en las cunetas muy abajo, apenas saliendo del pueblo. Buena señal. Una vez arriba el panorama es absolutamente impresionante por nieve y por gente trabajando preparando lo del dia siguiente:
Bueno, ya podeis ver en las fotos que un dia muy malo, nada de nieve, sin visibilidad y muchísima gente ;-)
Solo decir que la calidad de la nieve era absolutamente espectacular. A pesar de no hacer mucho frío aguantó la calidad perfectamente hasta las 16:30h. Me llevo un recuerdo de la última bajada que hice a las 16:30h de todo el desnivel esquiable incluyendo la pista de copa del mundo (por el lateral) en la que bajé solo. Y cuando digo solo, digo solo. No había nadie. Esa bajada con los GS aprovechando todo el ancho de la pista se quedará grabada en mi memoria para siempre. No ha empezado oficialmente esta temporada y he de decir que complicado va a ser tener un mejor dia de esqui que este.
Durante este día, tengo la que para mi es la foto de este viaje. Montamos en uno de los ‘huevos’ y se montan 2 chicas con nosotros con trajes de competición. La que tengo enfrente me suena, es del equipo sueco, es Jessica Lindell-Vikarby. La que está a mi lado no la veo bien, además me da vergüenza girarme con descaro, pero una vez más veo a mi mujer con los ojos como platos mirándola. Le miro las piernas y son brutales, si no supiera que es una chica apostaría que las piernas eran de un hombre. Le miro con disimulo las botas y son unas Atomic Redster de 170 de flex!!!!. Al final mi mujer se lanza y le pide una foto. A ver si alguno la conoceis:
Un dia perfecto que tardaré mucho tiempo en olvidar.
Una vez terminada la jornada de esquí bajamos a comer a Sölden y ya se empieza a ver mucho ambiente. Hay mucho tráfico, supongo que la gente acude el viernes después de trabajar para pasar el fin de semana. A partir de las 17:00h se organiza una fiesta en la Post Platz con grupos actuando en directo (muy buenos por cierto) y cuando anochece se hace el tradicional sorteo y entrega de dorsales. Es otra buenísima oportunidad de ver al top 10 del circuito. Pena que Fenninger se lesionara y no estuviera presente.
Aqui una foto de Nicky Hosp como maestra de ceremonias y la recogida del dorsal de Federica Brignione que finalmente se alzaría con la victoria al dia siguiente.
Sábado, nos levantamos muy temprano. Es dia de las carreras de las chicas. Según nuestro plan los dos días de competición no vamos a esquiar. Queremos disfrutar del ambiente y vivir las carreras desde la línea de meta con las peñas y demás aficionados. Tenemos pases generales para acceso a la zona de meta y con dichos pases no hay que pagar tampoco peaje para acceder con el coche. Tuve dudas entre comprar pases de grada o los de general, pero una vez visto con perspectiva creo que no merece la pena la grada ya que estás más lejos de la meta que si te colocas bien en la zona general y lo único que aporta es que puedes estar sentado.
Cuando llegamos al glaciar está todo montado: una pantalla gigante impresionante patrocinada, como no, por Audi, un escenario patrocinado por Pisten Bully, puestos de bebidas y comida, mesas instaladas por toda la zona, puestos de merchandising, etc
La actividad es frenética y empieza a verse mucha gente por todos lados. El ambiente es muy festivo. La gente empieza a beber desde muy pronto cerveza, licores, chupitos de Jager. Son las 8:00h y como pudimos ver más tarde mucha gente a las 17:00 de la tarde van ya como Las Grecas. La mayoría acuden a este evento por la competición en sí o el ambiente, pero hay mucha gente joven que se ve claramente que vienen a pegarse la fiesta y lo de las carreras es totalmente secundario.
Finalmente nos apostamos muy cerca de la meta y vimos las dos mangas desde esta ubicación privilegiada. Aqui unas fotos de nuestra perspectiva:
El podio final con vistas traseras:
De las carreras tengo cientos de fotos tanto de las chicas el sabado como de los chicos del domingo, pero no es plan de aburrir e inundar este reportaje con tantas fotos.
Solo comentar que el estar mezclado con las peñas y demás aficionados hace que se pase un día magnífico. Los aficionados franceses (más bien hooligans) montan una fiesta increible a pie de meta y siempre son los más ruidosos y los que más animan. Cuando bajó Tessa Worley era ensordecedor los gritos, bengalas, bocinas, etc. Si alguien vió la carrera en directo el aficionado francés que saltó la seguridad y abrazó a Tessa estaba justo al lado de nosotros. Aquí se puede ver un poco el ambientazo y algunos ‘especímenes’ franceses:
Aqui los franceses montando una mesa de pin pon:
Una vez que finalizaron las dos mangas, la entrega de premios y demás nos bajamos a Sölden a comer y a esperar a la famosa Fan Parade que tendría lugar a las 18:00h. Según nos vamos observamos como se lo ha pasado la gente y algunos ‘restos del naufragio’:
La Fan Parade se celebra el sábado de la competición y en ella se hace patente lo organizadas que están las peñas o fan clubs de los corredores y lo en serio que se toman esto. Después de lo visto arriba por la mañana, como era de esperar los franceses fueron los que aportaron más innovación y simpatía al desfile. Son un auténtico espectáculo. Para muestra el video y las fotos a continuación:
Al final del desfiles todas las peñas o club de fans terminan en la Post Platz de Sölden donde se procede a la entrega de flores a las ganadoras de la carrera de la mañana y se hace el sorteo y entrega de dorsales para los chicos del dia siguiente. En la plaza casi no se puede entrar de la gente que hay y el ambientazo es brutal. Música, sorteos, fiesta, bebida, etc. Realmente impresionante.
‘Dios Ligety’ con Nicky Hosp recibiendo el dorsal con el que finalmente se alzaría con la victoria al dia siguiente.
Marcel Hirscher
Felix Neureuther:
Esa misma noche tras la entrega de los dorsales y la actuación de varios grupos en la Post Platz, se organiza la fiesta principal del fin de semana. Nosotros finalmente no asistimos porque había sido un día muy intenso y al día siguiente había que levantarse a las 6:00h para subir a ver las carreras de nuevo.
El ambiente en el glaciar el domingo es más frenético aún si cabe. Nos habían comentado que el domingo la gente se duplicaba y era necesario madrugar más para aparcar en el glaciar por lo que a las 7:30h ya estábamos aparcados. Como bien nos indicaron ya se veía más gente que el dia anterior y los equipos estaban llegando y ya habia corredores calentando en pistas.
Nos colocamos a pie de meta, más o menos donde el día anterior y los corredores y entrenadores estaban reconociendo el trazado y memorizándolo como por ejemplo Kristoffersson:
Tras el reconocimiento los corredores pasan por nuestro lado y no pierdo la oportunidad de fotografiar a mi ídolo Ted Ligety:
La carrera discurrió a lo largo de la mañana. Impresionante ver la envergadura de Svindal, un auténtico vikingo:
Así quedó el podio tras las 2 mangas, en la que Ligety una vez más dió un recital en su especialidad:
Entrada a meta de Ligety en su segunda manga:
Y una vista ‘trasera’ del podium:
Una imagen (o en este caso unas imágenes) dicen que valen más que mil palabras, y parafraseando a Zanna Bianca ¿Merece la pena asistir a una prueba de Copa del Mundo?, solo puedo contestar una cosa: ¡ABSOLUTAMENTE SI!. Y si puede ser en la prueba inaugural de Sölden mucho mejor.