Espectacular Sierra Nevada, 9-10 Abril
Aunque el parte de nieve era prometedor, con casi toda la estación abierta y unos buenos espesores, no estaba muy convencido de que me fuese a encontrar buenas condiciones, la semana anterior había hecho muchísimo calor en el norte, así que creía que tan al sur iba a ser peor y que a partir de la una de la tarde íbamos a dejar los esquís en el coche.
Resumiendo, íbamos un poco en plan visita, creyendo que íbamos a esquiar sólo por pista, con nieve de mala calidad…… no sabíamos lo equivocados que estábamos.
El sábado cogemos la cabina Al-Andalus y mi primera visión de la zona de Borreguiles con el Veleta al fondo. Había nieve de sobra y bastante gente en esta zona.
Cogimos la silla ‘Vodafone’ y había unas vistas muy guapas hacia la Cuerda de la Dehesa, si no me equivoco.
Una primera bajada para ir conociendo la estación, calentando y comprobando el estado de la nieve, dura a primeras horas de la mañana. Hacia arriba, una vista guapa de la cara norte del Veleta, totalmente diferente de la vertiente oeste.
Se apreciaba al fondo Granada, y una capa de calima encima. Una pena que no estuviese claro el cielo en los tres días que estuvimos, esa capa oscura no llegó a desaparecer.
Una bajadina de calentamiento y volvemos hacia arriba para coger la percha Zayas y ver si la nieve ya había ablandado algo. Las vistas, impresionantes. Se aprecia que comienza a haber nieve justo a partir de Pradollano, a unos 2150 metros, aunque a esas cotas ya escasea mucho.
Como no conocíamos nada, preguntamos a un monitor con el que coincidimos en una silla si se podía hacer algún fuera pista majo, y nos dijo que la zona de la Laguna de las Yeguas era la mejor, así que hacia allí nos dirigimos a las 12:30. El valle se veía con buena nieve y en cantidad, además se podía llegar abajo sin pisar pista prácticamente.
Esta zona nos gustó mucho, la calidad de la nieve fuera de las pistas nos sorprendió, se dejaba esquiar perfectamente, además había varias líneas de bajada sencillas y sin gente. Nos dirigimos hacia los Tajos de la Virgen y había una buena vista de la vertiente sur del Veleta.
Al fondo se veía la Cuerda de la Dehesa, y la diagonal que había que hacer para bajar por los Tajos de la Virgen. Las vistas, espectaculares, mucha nieve y unas palas guapas.
Hacia el este, el Mulhacén.
La diagonal hasta llegar a la pala deseada.
Finaliza la diagonal y paramos para apreciar las buenas vistas hacia la zona de la Laguna, con el Observatorio y la estación Radioastronómica en el canto.
Seguimos en ese valle y a las 4 de la tarde(quién nos lo hubiese dicho al empezar la jornada…) decidimos comenzar la vuelta hacia Pradollano para finalizar el día, ya que la nieve comenzaba a estar blanda en las zonas bajas de la Laguna, pero muchísimo mejor de lo que esperábamos.
Vuelta al Veleta y otra foto de la cima.
Impresionante la caída hacia los Tajos del Veleta.
Decidimos bajar lo más a la derecha posible, pegados a la pista del águila pero por fuera en las zonas donde era posible. 1200 m de bajada, no está nada mal, si no me equivoco, el mayor desnivel esquiable en una estación española, o de Pirineo francés y andorrano.
De vez en cuando nos asomábamos a la cornisa para ver las vistas del otro lado.
El domingo, como ya teníamos el forfait comprado, decidimos dejar el coche en el aparcamiento de arriba(Los Peñones), junto a la silla de la Virgen de las Nieves, que estaba cerrada, pero la pista de bajada a Pradollano y la de llegar allí tenían nieve.
El día prometía espectacular de nuevo, fresco a las 9 de la mañana, pero totalmente despejado y el sol dando en la zona de las pistas negras que van desde Montebajo a Pradollano, por lo que tiramos hacia aquella zona, ya que la nieve se pondría mejor antes que en otras zonas.
Un primer paso por la Laguna de las Yeguas para ir hacia la loma de Dílar. La silla llenísima de gente a esas horas….
La estación radioastronómica de cerca.
Para no empezar por las negras con nieve muy dura, un par de bajadas por la Loma de Dílar que no conocíamos, unas pistas muy sencillas, pero a esas horas, sin gente y con la nieve dura, entretenidas para calentar y con unas vistas muy guapas hacia el norte.
Con la silla Montebajo cerrada, había que coger la Monachil para, bajando por la pista Montebajo, girar hacia el inicio de la Fuente del Tesoro. La nieve ya había roto, así que estaba fenomenal, por lo que decidimos tirarnos por fuera de la pista hacia la izquierda, hasta pasar por debajo de los restos de un alud provocados por la rotura de la cornisa. Unos buenos bloques de nieve había.
La segunda bajada decidimos hacerla por la parte derecha, ya que había algo más de pendiente y se bajaba más trecho fuera de pista, para ello había que cruzar la pista y subir un poco para pasar el paravientos por arriba.
Después de un par de bajadas más por ese fuera de pista, con una nieve espectacular, fuimos hacia el Veleta porque no queríamos marchar sin subir a la cima. Para ello fuimos hasta la Laguna, para subir por la silla hasta lo más alto, una vez allí nos quitamos los esquís y pateamos los escasos 100 metros de desnivel que hay.
Mereció la pena pujar por los esquís poco más de 10 minutos, las vistas desde la cima son espectaculares. El Mulhacén tiene una pala chulísima y aparenta poderse subir fácilmente haciendo travesía.
El valle del Guarnón muy guapo, daban ganas de tirar hacia allí, una buena bajada había. La verdad es que me sorprendió la zona, tiene muchísimas posibilidades para hacer travesía, quizas la próxima vez que vaya me decante por ello…
Una foto recuerdo de la cima del Veleta con el Mulhacén al fondo.
De nuevo fin de jornada después de las 4 de la tarde, bajamos lo mismo que el sábado, con una parada intermedia en los restos de lo que supongo sería un chozo de pastores y el Veleta al fondo.
El lunes era nuestro último día y teníamos que dejarlo antes, ya que el viaje de vuelta hasta Pucela era largo. Volvimos a dejar el coche en el parking de Los Peñones y tiramos directamente hacia la Fuente del Tesoro, nos habíamos quedado con ganas de hacer la bajada más a la derecha, entre las peñas.
La entrada tiene una pendiente maja, pero con buena nieve se dejaba bajar perfectamente, unos giros algo más cortos que por el lado que habíamos bajado el día antes y punto.
Hacia arriba se veía la entrada de la pala, en nuestro caso, por la izquierda según se mira. Una pendiente exigente, bajable fácilmente con cierto nivel, eso sí, personalmente con hielo no se me ocurriría, por si las moscas.
Y desde abajo, una buena vista de la zona, desde el pico a la izquierda por donde bajamos hoy y a la derecha por donde habíamos bajado ayer.
Para finalizar el día, una bajada desde arriba el Veleta hasta el parking, pasando de nuevo por los restos del chozo.
Para resumir, un sorpresón total, nunca hubiese pensado encontrarme esa calidad de nieve en esta época y menos con las temperaturas que estaba haciendo, y tampoco pensaba que íbamos a poder hacer tanto fuera pista.
Desde luego, era escéptico con lo de la nieve primavera de Sierra Nevada, pensaba que era una bacilada, pero realmente me pareció muy buena, mucho mejor que otros años en esta época en Pirineos, la verdad.
Además, me pareció que tiene unas posibilidades muy buenas para hacer travesía, subidas fáciles pero largas y que te permiten pillar unas palas muy buenas. Quizás haya que probarlo otro año.
Espero que os haya gustado el reportaje, un saludo.