Es éste un valle largísimo, que acaba en un circo glaciar amplio y cuajado de lagos, donde sobresale por tamaño y curiosidad el Llac de l´Illa.
A estas alturas del invierno, la parte baja del Valle está siempre a la sombra, lo que lo convierte en una nevera
Río congelado en el inicio mismo del Valle
Las partes altas, sin embrago, ya empiezan a recibir el calor del sol
Sobre el hielo y el suelo, hay una fina línea de nieve polvo que debe haber caído hace uno o dos días y que deja el entorno más bonito, pero el camino más complicado
Algunas cumbres, no recibirán el sol más que pocas horas al medio día, sin embargo la vista es preciosa
La temperatura es bajísima -11ºC, y el río está prácticamente congelado
A partir de 1700 metros la nieve es constante y en zonas en sombra, es casi abundante
Ante nosotros solamente las huellas de un zorro nos preceden. Parece que hace días que nadie ha pasado por el valle
Arriba ya se intuye el destrozo de la surada y del viento
El hielo del río ha hecho subir mucho el nivel del agua libre y ha encharcado el camino. El hielo vivo dificulta el paso
Finalmente y tras 4 horas llegamos al refugio dels Orris que será nuestra casa esta noche.
La noche ha sido muy fría, -12ºC fuera, y hemos conseguido dormir a -4ºC en el interior del refugio gracias a la chimenea, aunque es una pena que tire peor que un carro trucado… La puerta, abierta todo el rato para evitar un humo insoportable, nos ha dejado una noche…justita, y nos cuesta incluso que no se congele el agua de las cantimploras.
Sin embargo, la vista del río desde el interior del mismo refugio es espectacular (dormir oyendo el río no tiene precio…).
El día amanece menos frío -8ºC y con un sol espatarrante. La idea es llegar al refugio de l´Estany de L´Illa.
El valle está salpicado de pequeñas cabañas y orris. En caso de mal tiempo, hay muchas opciones de guarecerse
A medida que ganamos altura, nos encontramos con zonas con 40 cms. de nieve costra, y zonas con 10 cms. de la última nevada. Con el calor, el polvo se va convirtiendo en primavera. Y esto en el mes de Diciembre…
Hasta que finalmente llegamos al Refugio y Estany de l´Illa. La temperatura hace que no sean necesarios ni crampones ni piolet para progresar. Además el desnivel es constante pero sin ningún muro de consideración. Detrás del collado, está el valle de Pessons que desemboca en el sector de Grau Roig de GranValira.
La bajada es eterna, con 1000 metros continuados de desnivel
Refugi de Font Verd
Y que al final se nos hecha encima la noche. Una hora y media a oscuras que se hace eteeeeeerna.
En fin, otra forma de disfrutar la montaña cuando las condiciones no son las mejores. La montaña ofrece mucho más que esquiar en invierno, y si se hace con seguridad, vale la pena.
Espero no haberos aburrido. A ver si la próxima vez es sobre esquís y con nieve polvo… Un abrazo. Pablo Creus y Oscar Peña.