La Pinilla 23 Noviembre 2007
Durante todo el tiempo que conduje por la Comunidad de Madrid, tiempo soleado y despejado. Llegar a Somosierra y encapotarse el cielo fue todo uno. Y a los pies de La Pinilla, la cosa pintaba así.
El final del Retorno, visto desde el parking. Bastante blanquito!!
Lúa no pudo aguantar la tentación de lanzarse a retozar. Hay que ver cómo le gusta la nieve.
Por la zona alta se veía bastante cubierto todo por ese manto blanco que tanto nos gusta.
Y por la zona baja pues... decidimos comprobarlo Lúa y yo. Espesores de impresión!!!
El paisaje era de ensueño.
Se veía bastante movimiento en la estación. Por lo visto apagaron los cañones poco antes de llegar yo, así que esa estampa me la perdí. Pero sí vi cómo arreglaban las pistas, ensanchándolas y tapando agujeros.
Las sillas, todas guardaditas aún, esperando el gran estreno de la temporada. Así que los trabajadores que tenían que subir a la zona alta, a pasar frío en las plataformas. Sacrificados sí son, la verdad.
Pero como lo que imagino que más os importa es el estado de las pistas, aquí os pongo varias fotos. Aún hay poco, pero lo que hay promete.
En fin, como ya nos habíamos pateado bastante del Retorno y bastante de Ardillas, y hacía fresquete (3º según vi luego en el termómetro del coche), Lúa y yo decidimos volver a la base a tomarnos un piscolabis en el Igloo.
Las previsiones no dan más nevadas por ahora, pero en la estación juran y perjuran que mientras continúe este frío, los cañones no van a tener tregua. ¡Estamos en la cuenta atrás!