Podrían ser perfectamente las primeras imágenes de la nueva estación de esquí que se quiere construir en Arabia Saudí, pero lamentablemente es una vista aérea de La Molina y Masella. La falta de nevadas en lo que llevamos de invierno ha dejado esta estampa inusual para un mes de diciembre. Este es el segundo invierno consecutivo en que las condiciones están muy por debajo de lo habitual, tras tres años seguidos de sequía en gran parte de Cataluña.
La imagen fue publicada hace unos días en Twitter por Jordi Bonet y rápidamente fue ampliamente contestada por otros usuarios, y replicada en varios medios de comunicación.
La foto aérea refleja la realidad de este invierno en gran parte del Pirineo, aunque ambas estaciones de esquí se sitúan realmente en el Prepirineo. Unidas por un mismo forfait en su conjunto forman un área esquiable de 145 km de pistas, pero este invierno todavía no se han podido abrir las conexiones entre ambos dominios.
De esta manera, Masella está abriendo este último fin de semana del año con 31 kilómetros de pistas, mientras que su vecina La Molina con 14 km. Sin duda alguna tras un enorme esfuerzo tanto humano como en recursos económicos. En las circunstancias actuales, poder abrir toda esa oferta, no debe ser nada barato.
Parece que cada vez se ve más claro un cambio de tendencia en la meteorología. A partir del fin de semana de Reyes las previsiones apuntan a la llegada de una borrasca generalizada en el Pirineo que podría dejar nevadas con cierta intensidad, y abrir la puerta a que lleguen otras posteriormente.
Hasta ahora o llegaban muy desgastadas hasta esta parte del Pirineo, o directamente no llegaba nada. En otras ocasiones como la de antes de ayer, pasaba un frente de nubes sin dejar una gota de precipitaciones.
Las previsiones meteorológicas apuntan un cambio de tendencia
