El 4 de enero hacia las 10.50h de la mañana un esquiador húngaro grababa desde un telesilla como un snowboarder tenía problemas para mantenerse de pie sujetado en la percha de un telesquí que remontaba una cuesta muy empinada de la estación de esquí de Kreischberg (Austria).
Primero se le resbaló la percha, la cual luego trató de sujetarla con ambas manos y posteriormente intentó colocarla entre las piernas. Y es ahí, poco antes de llegar arriba que no pudo más y cayó chocando contra los esquiadores y snowboarders que venían detrás haciéndolos caer del telesquí, uno por uno, y dejando un rastro de destrucción a su paso. Cuando llegó abajo se montó en su tabla y se fue sin prestar ayuda.
A las pocas horas de subirlo en Facebook el video se viralizó, se resubió en otras redes, grupos de Telegram, Whatsapp y foros de esquí. Todo el mundo se lo tomó con humor, pero los afectados informaron del incidente al Servicio Alpino del Comando de Policía del Distrito de Murau. Los agentes lanzaron una orden de búsqueda del culpable y lo detuvieron varias horas después ese mismo miércoles.
No está claro si se le aplicará alguna sanción, pero la mayoría de esquiadores que vieron los videos acusan al snowboarder de subirse a un remonte para expertos y de su incapacidad para poder manejarlo.
Otros aseguran que ese tipo de percha en forma de T no debería haberse colocado en una cuesta tan empinada ya que invita a sentarse y eso puede provocar perder el equilibrio si va una sola persona.