La falta de nieve de esta temporada ha obligado a cerrar la estación de esquí de Tavascán, situada en el municipio de Lladorre (Pallars Sobirà), durante las fiestas de Navidad y Reyes. Este periodo, sumado al del puente de la Purísima, supone más de la mitad de la facturación de toda la temporada, según indicaron los gestores de la estación en un comunicado.
De este modo, aseguraron, que haber sido cerrados
"implica un daño irreparable de cara a este invierno 2022-23. Así, Nos quedamos muy cerca de abrir, ya que el grosor era prácticamente lo necesario y si hubiésemos tenido algo de producción de nieve hubiera sido posible. De hecho la zona de debutantes, la única en la que hay cañones de nieve, estuvo en funcionamiento."
Desde la estación de esquí de Tavascán han explicado que no poder abrir hace que más del 60% de la plantilla necesaria para hacer funcionar el complejo siga sin estar contratada, agravando la situación de precariedad de los trabajadores de la temporada. También han indicado que, de poder hacerlo durante este mes de enero, la duración del contrato sería demasiado corta para un trabajo de temporada.
Tavascan es la única estación de esquí alpino de gestión municipal en Cataluña, y su presupuesto sale de las cuentas anuales del Ayuntamiento de Lladorre. Esto hace que, según han expresado en el comunicado, sea "imposible invertir en nieve producida", así como optar a las subvenciones que la Generalitat da a las estaciones privadas para este fin, lo que, según aseguran, la deja en una situación muy complicada para garantizar su continuidad.
Más implicación de FGC
El pasado mes de noviembre el ayuntamiento ya pidió a Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) que se implicara más en la gestión de la estación de esquí "para asegurar el futuro económico de la zona" y les planteó que asumiera los gastos en caso de que se avería el telesilla o la máquina quitanieves.
Tal y como explicó el Ayuntamiento a Pallars Digital, lo ideal sería firmar un convenio para que FGC pudiera ayudar en caso de que se produjera un problema de este tipo. Un objetivo que aún no se ha logrado, pero por el que, afirmaba, "hay voluntad de hablar de ello".
De momento, sin embargo, la estación sigue sin empezar la temporada de esqui por la falta de nieve. Una eventualidad, que sumada a cualquier otro percance, podría provocar el cierre de la estación y "poner en peligro la vida en el municipio", como alertaba hace unos meses su alcalde.
