La técnico italiana escribió hace unas semanas un artículo de opinión en Skiracing, donde explicaba estas diferencias. Federiga Bindi co-dirige una academia de deportes de nieve en el Sud-Tyrol, además de una red europea de Entrenadores de esquí alpino. Con la pandemia del COVID se vio obligada a quedarse en los Estados Unidos con su familia, lo que le dio una mejor oportunidad para ahondar en como se vive el esquí a ambos lados del Atlántico e intentar entender porqué este deporte es menos popular allí que en nuestro continente.
Bindi recuerda que en todo el estado de Colorado, con 5 millones de habitantes, tienen el mismo número de corredores que en l Sud-Tyrol, con apenas medio millón de ciudadanos. Entre las razones que argumenta para esta diferencia está en que entrenar en los Estados Unidos es cinco veces más caro que en Italia. Auque el nivel de vida es por lo general más caro allí que en el país europeo, también lo son los sueldos.
Y luego está la cultura de base. Recuerda que el esquí alpino como turismo empezó a desarrollarse a principios del siglo XX tanto en las Rocosas y como en la parte sur de los Alpes, sin embargo en Italia (y Europa en general) este deporte es más popular que en los Estados Unidos porque aquí se considera pasar una semana en la nieve tan importante como ir a la playa en verano.
El modelo económico de las estaciones de esquí estadounidenses se lo pone difícil al turista que quiere ir eventualmente. Los precios de los forfaits de 1 día son escandalosamente caros, al igual que las clases de esquí. La mayoría de los complejos turísticos son propiedad de una corporación, que también controla los aparcamientos, hoteles, apartamentos, restaurantes en la montaña y, a menudo, incluso las tiendas, creando pequeños monopolios u oligopolios locales.
"Nuestra zona de esquí, Dolomiti Superski, con unas 1.500 kilómetros esquiables, es una cooperativa que paga el alquiler a los agricultores propietarios de las montañas y distribuye las ganancias en función del número de forfaits vendidos. Los restaurantes en las pistas donde paramos para comer delicatessen son todas de propiedad y gestión independiente. Lo mismo ocurre con los hoteles, los apartamentos, etc. El resultado es que las zonas que antes eran pobres se han desarrollado armoniosamente."
Orto aspecto importante lo demostró con un estudio realizado gracias a una subvención de la Unión Europea (PDF), donde se puede constatar como las áreas urbanas creadas o existentes alrededor de las estaciones de esquí es territorio para gente de clase económica alta, mientras que el resto ha de conformarse con las periferias, más pobres y subdesarrolladas. De hecho este punto lleva siendo muy criticado estos últimos años, poniendo especial acento en Jackson Hole, la ciudad más cara para vivir en los Estados Unidos, que ha ido expulsanso a los residentes habituales, porque el coste de la vivienda e impuestos han subido tanto que solo los acaudalados pueden adquirir una propiedad, que muchas veces solo ocupan unas semanas al año.
La cultura competitiva americana
Federica Bindi destaca también otro aspecto en la cultura deportiva americana, que en el esquí se hace más patente. Asegura que en Europa el principal objetivo es que los chavales que entrenan se lo pasen bien, y esperar que gracias al gran flujo de nuevos corredores, alguno destaque. Pero que principalmente que se queden practicando el esquí alpino.
En cambio los estadounidenses llegan con mucha presión, obsesionados con los puntos FIS y tienen que intentar hacerles entender que es necesario encontrar un buen equilibrio entre entrenamiento de calidad y descanso. Y pone un ejemplo. Mientras sus chicos en Italia aprovechan las horas fuera de entrenamiento para divertirse con sus amigos esquiando por las pistas de la estación, esto no pasa con los corredores americanos. Esto impide que se relajen y se tomen su tiempo para abrazar la parte alegre del esquí y la competición.
Por eso, en Italia, un objetivo de todos los corredores de esquí es seguir con su afición favorita y convertirse en instructor de esquí y, finalmente, continuar como entrenador. Los instructores no certificados que se encuentran incluso en las mejores estaciones de esquí de los Estados Unidos (un fenómeno tan generalizado es probablemente una estrategia para mantener bajos los salarios) no existen en Europa, donde se necesitan entre uno y tres años de capacitación para convertirse en un instructor completamente certificado, y más aún para convertirse en entrenador.
Por esta razón, la profesora italiana asegura que la técnica en la enseñanza en los Clubs de competición también es diferente. Y es que mientras en los Estados Unidos se enseña a ir lo más rápido posible, en Italia pone mucho énfasis en los cimientos y en enseñar a los atletas a esquiar técnicamente bien, y no solo rápido,
"Lo más probable es que un excelente esquiador también se vuelva rápido.
Convertirse en instructor de esquí es un logro importante, que se celebra en consecuencia. Nuestros instructores están bien pagados (a pesar de que las clases son mucho menos costosas que en los EE.UU.), Y los turistas se enorgullecen de mejorar su esquí y el de sus hijos."
"En otras palabras: en los Estados Unidos, un atleta que no llega a un equipo nacional o universitario ha “desperdiciado” años de esfuerzo y medios. E incluso aquellos que llegan al equipo de esquí de EE.UU. deben pagar altas tarifas y costos de su bolsillo para competir. En Italia, a los atletas generalmente se les ofrece un puesto remunerado a largo plazo en uno de los equipos deportivos del Ejército (el llamado Gruppi Sportivi), pero prácticamente la carrera de todo deportista acaba siendo una valiosa herramienta profesional. Si eso se convertirá en una ocupación principal, o simplemente en una de medio tiempo mientras estudias o progresas profesionalmente, realmente no importa. Lo que importa es que, ya sea que uno se convierta en campeón o no, siempre hay un beneficio mutuo en las carreras de esquí. Eso no existe en los EE.UU.
Por eso, lo único que importa es subir al podio; pero al final, solo tres atletas pueden pararse en él ..."