De 132.000 días de esquí vendidos la temporada pasada a los cerca de 100.000 de la que se acaba de cerrar. Una bajada del 40% que pese a todo, es el mejor dato de nuestro país en un invierno en el que las estaciones que han abierto, lo han hecho para un puñado de esquiadores diarios, reportándose descensos de hasta el 90%.
San Isidro y Leitariegos por tanto pueden darse por afortunadas. La primera de ellas ha cerrado con 79.000 días de esquí vendidos, mientras que su compañera Leitariegos lo ha hecho con 11.000.
León fue la primera en abrir la temporada de esquí en nuestro país. Era un 12 de diciembre cuando se ponían en marcha los primeros remontes en San Isidro, aunque solamente para los vecinos de la provincia. Por aquella época España estaba inmersa en plena ola del COVID y muchas restricciones de movilidad, sobre todo porque muchos Gobiernos autonómicos buscaban bajar la incidencia de cara a las fiestas de Navidad.
No ha sido esta la única dificultad que se encontraron los clientes que querían esquiar en San Isidro. Las fuertes colas en las taquillas provocada por el mal funcionamiento de la venta on-line o el retraso en abrir el sector de Riopinos han sido alguna de las situaciones más criticadas.
Desde la consejería de Turismo de la Diputación de León, se espera que este verano pueda avanzar la conexión con Fuentes de Invierno. A lo largo de este mes o el que viene, se prensentará a la Unión Europea el proyecto para poder recibir fondos que ayuden a tirar adelante la unión por remontes y pistas. Algo para lo que se necesitan estudios de impacto ambiental y permisos. No obstante antes habría que solucionar el tema del tendido de la conexión eléctrica a la estación asturiana.