Nada que no hayamos visto antes, como fue el caso de Nissan. La marca japonesa está participada por Renault, con quien ha firmado una alianza junto a Mitsubishi. El gobierno frances así mismo tiene el 15% de la firma automovilística gala, asi que cuando pidieron ayudas económicas, lo primero que se les exigió fue llevarse más producción a ese país. Y es así como Barcelona se quedó sin la planta de la Zona Franca.
No va a pasar lo mismo en el caso de la fábrica que Rossignol tiene en Artés (Barcelona), una de las mayores plantas de producción de esquís del mundo. Pero algo de todo lo que se hace allí se deberá llevar a Sallanches, donde Dynastar tiene su centro principal, a los pies del Mont Blanc.
Y es que la región de Auvergne-Rhône-Alpe les ha prometido 1,2 millones de euros en ayudas económicas a devolver en tres años, siempre y cuando se traigan parte de la producción de España y de esta manera creen puestos de trabajo en Francia.
En total se calcula que serán unos 10.000 pares de esquis los que se irán a Francia para la temporada 2023-2024, los de muy alta gama de Dynastar. Para Laurent Wauquiez, presidente de la Región, es este tipo de inversión la que permitirá que el sector de la montaña salga de la crisis que atraviesa.
El Group Rossignol por su parte, aprovechará parte del dinero para montar un museo/sala de exposición para poder mostrar sus productos a sus clientes, tiendas y público en general.