Inventó así el teleférico para transporte de personas, y con su patente en la mano se fue a diferentes países de Europa que por características orográficas parecidas a las españolas, podría encajar su invento. Pero recibió el rechazo e incluso la mofa de algunas diarios, como los de la prensa suiza. Es así como se tiene que volver a España, y decide que antes de que caduque su patente, construir el primer teleférico para el transporte de personas del mundo, el cual se conoció como el "Tranvía aéreo del Monte Ulía", en San Sebastián. Se inauguró en 1907 y tras una corta vida de tan solo cinco años, se desmontaba en 1912 al inaugurarse el Parque de Atracciones Monte Igueldo.
No obstante aquello sirvió para que al otro lado del océano sí confiasen en el inventor español. En agosto de 1916 la sociedad que gestionaba las Cataratas del Niágara decidió confiarle la instalación de un transbordador para personas. Hoy, el conocido como el Spanish Aerocar, continua siendo el sistea teleférico más antiguo del mundo en funcionamiento, aunque eso si, ha recibido mejoras en tres ocasiones, en 1961, 1967 y 1984. Los canadienses sí muestran con orgullo el invento del cántabro con una placa a la entrada de la atracción en la que se puede leer:
Leonardo Torres Quevedo (1852–1936) fue un ingenioso ingeniero español. Entre sus creaciones destacan máquinas algebraicas, mandos a distancia, dirigibles y la primera computadora del mundo.
El coche aéreo español del Niágara fue diseñado por Leonardo Torres Quevedo y representa un nuevo tipo transporte por cable aéreo, que llamó «transbordador». Se inauguró oficialmente el 8 de agosto de 1916, siendo el único de su tipo en existencia.
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La Comisión de Parques del Niágara, 1991
La mayoría de teleféricos del mundo siguen funcionando como recreación turística, especialmente para acceder a zonas con estupendas vistas panorámicas o para acceder a rutas de senderismo. Muy pocos están al servicio del transporte urbano. Para este tipo de viaje por cable se instalan sistemas de telecabinas, como se está viendo especialmente en varios países de Sudamérica (Bolivia, Colombia, etc...) o en Argelia, donde varias lineas como las del metro, acercan a los pasajeros a diferentes barrios de las ciudades.
Aunque la mayoría son destinados al sector turístico, muy pocos se usan en estaciones de esquí si los comparamos con los que hay instalados fuera de los complejos invernales. Y España, aunque es cuna de este sistema de transporte, tampoco escapamos a esta tendencia. En nuestro país contamos con 7 teleféricos:
Situado en la comarca de Liébana (Cantabria), lleva abierto desde el 6 de junio con entradas gratuitas por cada consumición de más de 18 euros (8 euros para niños) que se haga en establecimientos de la comunidad autónoma. Desde ayer 26 de junio la promoción se extiende a todos los españoles que hagan una pernoctación en un alojamiento cántabro.
Durante este verano, salvo cambios de última hora, al teleférico de Fuente Dé solo podrán subir un máximo de 5 personas por cabina. Los responsables calculan que con esta limitación, solo da tiempo a vender entregar un máximo de 320 pases diarios durante la campaña de verano.
Situado en esta localidad de Málaga, tiene el trayecto más largo de nuestro país. Son 15 minutos de viaje que permite alcanzar una cota de 769 metros de altitud donde en días más claros se puede ver la costa de Africa. Como promoción, este verano los niños menores de 12 años no pagan.
Inaugurado en 1931 todavía funciona con la mayoría de sus piezas originales. Un viaje al pasado que estos días los empadronados en Barcelona pueden disfrutar de manera gratuita y que conecta la montaña de Montjuich con el puerto de la ciudad vía aérea por cable.
Se han incrementado y reforzado las medidas de higiene y desinfección de las cabinas y demás instalaciones. Además es obligatorio el uso de mascarilla tanto dentro de las cabinas como en el resto de espacios. También se controlará el aforo de usuarios, se han instalado diferentes puntos con dispensadores de gel hidroalcohólico para la desinfección de manos y se ha colocado señalización específica para el mantenimiento de la distancia de seguridad.
Se trata del teleférico más antiguo de España. Funciona desde 1930, y también con la mayoría de piezas originales, lo que nos permite realizar otro viaje al pasado como el que nos ofrece el teleféric de Montjuich. Aquí también se han aplicado distintas medidas de prevención frente al corinavirus, como la venta on-line de tickets, desinfección de los espacios, distanciamiento, limitación de aforo, mascarillas y colocación de dispensadores de gel hidroalcohólico.
Lleva dando vueltas desde 1969. Con inicio en el paseo del Pintor Rosales y final en la Casa de Campo. Abrió de nuevo el pasado 22 de junio también con un amplio programa de desinfección de cabinas e instalaciones que incluyen techos y suelos. Además, después de cada viaje se realiza una limpieza rápida sobre las superficies de contacto como barra interior, asientos y puerta.
La capacidad máxima por cabina estos días está limitada a 6 personas si pertenecen al mismo núcleo familiar. Se obliga al uso de mascarilla y solo se puede pagar con tarjeta o medios on-line. También se obliga a mantener una distancia de 1,5 metros entre personas y se pone a disposición del público gel hidroalcohólico.
Además de estos 5 remontes, podemos disfrutar del teleférico de l'Estany de Gento, en el Pallars Jussà (Lleida). Es un aparato propiedad de Endesa, que desde verano de 1991 cede al Ayuntamiento de la Torre de Cabdella para su uso turístico. Lamentablemente las medidas impuestos por la pandemia del coronavirus impidió hacer la revisión a tiempo, por lo que se ha tenido que retrasar, sin fecha todavía, su puesta en funcionamiento que estaba prevista para el próximo 1 de julio.
Es uno de los teleféricos mas interesantes de visitar en Europa, ya que consta de 5 cables, y además tiene una capacidad descomunal de carga, capaz de transportar hasta 25 toneladas de peso. En una ocasión, de su cabina se colgó un camión hormigonera con la cuba llena de material.
Por su parte el Teleférico del Teide, el más alto de nuestro país, parece que abrirá a partir del 28 de julio. De momento no ha anunciado cuales serán las limitaciones de acceso para cumplir con las normas de prevención del coronavirus.
En Barcelona hay un segundo aparato de transporte por cable además del situado en el Port. Bajo la denominación de Teleféric de Montjuich, realmente es un telecabina, que estos días también está abierto, con medidas de restricción para evitar la propagación del coronavirus, y con acceso gratuito a los residentes en Barcelona