Llego finalmente desde Barcelona al lugar de encuentro, el hotel Augusta (situado en el valle de Boí Taüll). Fuera hace frío y ha nevado mucho… tanto, que llevo conduciendo más de 100 kilómetros nevados por carretera, es una fecha casi histórica de un 28 febrero donde la ola de frío y nieve no da tregua durante unas 48 horas. La circunstancia promete muy buenas sensaciones, pido un té mientras Ana me llama para decirme que llega algo más tarde desde algún lugar del Pirineo Aragonés, donde tenía compromisos con sus patrocinadores…
Cae la tarde y allí está, entrando por la puerta de recepción, equipada con interesante material técnico como quien acaba de descender la montaña hace pocos minutos en un frío de atardecer invernal … Nos saludamos y la observo con atención en los primeros minutos de nuestro encuentro…entonces, comienzo a entender un poco más a quien tengo delante. Su presencia es notable, su “look” de montañera experimentada y sus primeras preguntas de “¿Qué hacemos aquí y cuál es el plan?”, me constatan que no se trata de una snowboarder común… Nos acomodamos en el salón del hotel donde empieza una distendida charla que dura algo más de una hora. Mientras tanto, un estrecho colaborador y fotógrafo de esta publicación tiene serios problemas con el temporal para llegar en horario. En la zona Spa del hotel, dos grandes de la tabla y de nuestras montañas se relajan; son Alfons García y David Vicente, sobradamente conocidos en la escena y grandes amigos de Ana quien seguidamente empiezo a conocer y aquí os cuento un poco…
ANA SUEÑA… despierta, busca la felicidad y la encuentra, viaja, se lanza a por nuevos retos, lee la montaña y sus posibles descensos mientras le sonríe al mal tiempo (dice que los días malos en la montaña, sin visibilidad, con zonas heladas e incluso viento te hacen fuerte y valen por dos)… Así es esta aragonesa nacida en Biescas y que vive a caballo entre el Valle de Tena (en los alrededores de las estaciones de Panticosa y Formigal) y en los Alpes, donde va frecuentemente además de Sudamérica, lugar donde continúa la temporada en la zona de los Andes… y así; viajes, retos alcanzados, nuevas experiencias y emociones de toda índole, le han proporcionado esa carismática personalidad.
Ana es seguramente la más completa y experimentada freerider de snowboard de nuestro país. Decir que hasta hace algo más un año, estaba entre las Top 3 europeas dentro del circuito FWQ, tiene una importancia relativa para quienes la conocen y viven experiencias con ella… su inquietud, sus actitudes, poder mental y su búsqueda continuada de nuevos retos y caminos, están como reconoce ella, en esas tres cuartas partes de su tiempo en la vida donde solo la encontrarás en la montaña… quizás ascendiendo con un splitboard, quizás y sencillamente contemplativa mirando el paisaje…o quizás descendiendo por lugares inesperados, poco accesibles y de importantes desniveles. La montaña es su hogar por naturaleza, donde encuentra equilibrio y armonía en los doce meses del año. Enfadarse con Ana resulta imposible por su educación, dulzura, amor a la vida y respeto hacia su entorno, si a alguien se le ocurriera enfadarse con ella y le soltara algo como un; ¡Piérdete! O un ¡Vete a la montaña! Creo que lo tomaría como un gran consejo, ¡perderse en la montaña es lo suyo!.
Sus padres Angel y Maica le alumbraron el camino llevándola a buen club de esquí donde ella reconoce haber sido un poco rebelde, buscando el lado salvaje y menos disciplinado de la montaña y el esquí alpino… Más tarde llegó el boom del snowboard y con catorce años, empezó una nueva relación con la nieve que dura ya dieciocho años.
Hace un mes y después de cinco años, Ana cerró su tienda donde vendía ropa de calle en Biescas, cerca de su campo base en el Valle de Tena, donde compaginaba trabajo con escapadas a la montaña. En la actualidad, combina su tiempo con el trabajo en la casa rural de propiedad en Oros Alto, una localidad en la provincia de Biescas en el Alto Gállego, donde el número de habitantes no pasan de una treintena. Sus primeros años de prácticas, sus objetivos para sacarse el TD3 como entrenadora nacional de Snowboard y su presencia en algunas competiciones nacionales e internacionales del circuito FWQ, quedan hoy algo más lejos en su mente por ahora.
“Llevo doce temporadas de invierno seguidas entre Sudamérica y Europa) mis últimos cuatro inviernos han sido compitiendo, dos de ellos en el circuito 4 estrellas del FWQ (Freeride World Quest) que da acceso al FWT (Freeride World Tour). De esos dos años tuve uno muy bueno compitiendo y otro malo. ( creo que no es mi destino subir al FWT, mi lugar es otro!”
Son palabras de Ana, quien ha tomado la decisión de evolucionar en su carrera personal y emocional con el entorno nieve y dedicarse plenamente (a excepción quizás de un par de importantes competiciones), a emocionantes proyectos, el último fue este pasado mes de agosto en Perú.
En solitario y como punto de partida desde España, voló a Perú para ascender y descender la imponente montaña del Tocllaraju, situada en la cordillera de los Andes. Ana es hoy la primera española en subir con un splitboard esa majestuosa montaña. La primera ascensión en la historia documentada, fue lograda por alemanes en 1939, una cima de exactamente 6.034 metros de altitud.
Pero hay algo más… Ana busca experiencia, cultura andina, conocer bien a su gente, su manera de ver y sentir la montaña, Ana busca la conexión a través de su medio de transporte, una tabla partida para ascender y unida para descender. Un Splitboard.
Con este proyecto de 6.000 Split, Ana buscaba algo diferente dentro de la industria más comercial del snowboard femenino. La imagen encorsetada y el “cliché” de lo que vende la industria está muy lejos de lo que ella quiere alcanzar como montañera y rider, sin duda.
Ana prepara nuevos proyectos en la actualidad, poniendo máxima ilusión a la vida… mientras tanto, desde su casa, con las referencias montañosas del Peña Blanca al norte y el Erata al sur, Ana, seguirá soñando y madrugando disfrutando en el jardín de su casa, el Valle de Tena.
Estas son algunas de las frases que acompañan a esta excepcional rider de la marca Salomon en su vida:
“Mi vida es nieve y todo gira entorno a ella”
“La vida es un suspiro y si nos quedamos dormidos se nos va”
“Es más fácil separar una ola de la arena que a mí de la nieve”
‘Lo mejor de la temporada aún está por venir”
“La vida es un suspiro y si nos quedamos dormidos se nos va”
“Es más fácil separar una ola de la arena que a mí de la nieve”
‘Lo mejor de la temporada aún está por venir”
Ana y Salomon Snowboards
"Mi vinculación con la marca Salomon comenzó ya hace 5 años, durante este tiempo mi snowboard ha visto una evolución desde el freerride de competición en líneas explosivas hasta el día de hoy en las big mountains.
Siempre he encontrado en Salomon el material que he necesitado en cada momento.
Desde mi Sick stick 157 para líneas explosivas en competiciones y en el día a día, la cual siempre me ha dado la seguridad de agarre en todo tipo de terrenos, cosa que en el Pirineo nos encontramos con bajadas de nieves muy cambiantes y durante nuestras líneas una tabla que sea capaz de responder a todo… me hace sonreír de arriba abajo sintiendo seguridad y flow durante todo el recorrido de mi línea.
Y de ahí viene una de mis splitboards favoritas, con las que paso la gran mayoría de mis días en montaña, está basada en mi tabla del día a día, la Sick stick, ya no solo conserva la misma reacción que mi tabla de diario es que sumándole a eso, es una de las splitboards más ligeras del mercado, la cual me ha llevado desde bajar un Aneto hasta bajar un pico de 6000 metros en Perú.
Una splitboard que tiene toda mi confianza a la hora de embarcarme en nuevos descensos.
Salomon para mí no es solo un sponsor, es una familia, la cual siempre busca la manera de ayudarme en mis proyectos ( que cada día son más comprometidos y complicados jeje), ellos creen en mí como rider y como persona, en los momentos buenos y en los malos… y es muy importante tener esta confianza como rider para poder continuar con mi carrera como deportista y conseguir mis nuevos retos.
Una gran marca que me permite desde correr ligera en verano por la montaña hasta descencer montañas que jamás hubiese imaginado."
Siempre he encontrado en Salomon el material que he necesitado en cada momento.
Desde mi Sick stick 157 para líneas explosivas en competiciones y en el día a día, la cual siempre me ha dado la seguridad de agarre en todo tipo de terrenos, cosa que en el Pirineo nos encontramos con bajadas de nieves muy cambiantes y durante nuestras líneas una tabla que sea capaz de responder a todo… me hace sonreír de arriba abajo sintiendo seguridad y flow durante todo el recorrido de mi línea.
Y de ahí viene una de mis splitboards favoritas, con las que paso la gran mayoría de mis días en montaña, está basada en mi tabla del día a día, la Sick stick, ya no solo conserva la misma reacción que mi tabla de diario es que sumándole a eso, es una de las splitboards más ligeras del mercado, la cual me ha llevado desde bajar un Aneto hasta bajar un pico de 6000 metros en Perú.
Una splitboard que tiene toda mi confianza a la hora de embarcarme en nuevos descensos.
Salomon para mí no es solo un sponsor, es una familia, la cual siempre busca la manera de ayudarme en mis proyectos ( que cada día son más comprometidos y complicados jeje), ellos creen en mí como rider y como persona, en los momentos buenos y en los malos… y es muy importante tener esta confianza como rider para poder continuar con mi carrera como deportista y conseguir mis nuevos retos.
Una gran marca que me permite desde correr ligera en verano por la montaña hasta descencer montañas que jamás hubiese imaginado."
Sigue su historia del proyecto 6.000 Split en:
http://www.splitboardmag.com/article/tocllaraju-peru-ana-salvador/
