La sensación subjetiva de algunos esquiadores, es que tras la inauguración del Fexenbahn, hay más gente en pistas porque ha cambiado el flujo de los clientes que llegan desde St. Anton. Hasta el año pasado la conexión se hacía en bus, lo qus disuadía a muchos de hacer el enlace, pero ahora es muy sencillo con el nuevo teleférico.
El alcalde de Zürs, donde más se está notando, admite que efectivamente está entrando más esquiador, pero que ellos siguen limitando la venta de forfaits. Los líderes políticos locales afirman que pese al nuevo remonte, sigue existiendo la esencia de la limitación. No obstante nadie quiere dar de momento los números exactos de clientes que esquian en las pistas de Lech-Zürs, caracterizadas por ser más familiares y un entorno totalmente tranquilo en comparación con la bulliciosa St. Anton.