Ahora por tanto es muy justo ya para volver a presentar un demanda en Colorado, y que se de sentencia antes del Descenso de Kitbühel o los Mundiales de Saint Moritz el próximo mes de Febrero, objetivos que perseguía Bode Miller para poder competir con su nueva marca Bomber Skis y de paso hacer su despedida.
Recordemos que el norteamericano anunció su regreso a la competición, pero que lo haría con la marca Bomber Skis, una compañía neoyorquina con sede en la Quina Avenida, en la que Bode Miller se ha involucrado, primero como embajador, y luego como diseñador de producto y accionista. Afirmó que su contrato con Head se había acabado, y que podía correr con el nuevo material sin problemas.
Pero la marca austriaca le corrigió afirmando que lo que habían roto es el contrato que le obligaba a seguir compitiendo hasta finales de la temporada 2016-2017. Que le dejaban que colgara las botas, que promocionara su nueva marca, pero que si quería competir, lo debería hacer con esquís y botas Head. Al menos hasta Marzo de 2017.
Bode Miller se decicó a la cría de caballos, a la de sus hijos, a tener un nuevo bebé, comprar una marca de ropa y promocionar Bomber Skis. Hasta que este mes de Octubre afirmó que volvería a competir, y que si Head no le dejaba, lo llevaría a los Tribunales,
Bode Miller afirma que está dispuesto a trabajar para presentarse en los Juegos Olímpicos de Pyeongchang en 2018. Claro que para lograr eso deberá demostrar el entrenador del equipo estadounidense Sasha Rearick que todavía tiene la energía necesaria. El U.S. Ski Team tiene solo 4 plazas por carrera. Miller debería luchar por hacerse con uno de esos huecos. La última vez que se ha puesto unos esquís de competición fue el pasado mes de Noviembre en Copper Mt. durante los entrenamientos que los americanos hacen tradicionalmente en esa estación de Colorado mientras la Copa del Mundo pasa por aquellas tierras. Sin embargo no demostró tener una gran velocidad. La mayoría de chicos de su federación le superaron.
Desde entonces Bode Miller no ha hecho ningún entrenamiento más. Se esperaba que hiciese alguno en Europa para poder competir en Suiza o Austria y entonces ser evaluado y decidir si se le da una de esas cuatro plazas.
Rainer Salzgeber, Director de Carreras de head, tampoco lo ve para competir. Afirma que su nivel en Copper era muy discreto y que se ha de saber cuando decir basta y colgar las botas.