"Estoy alucinado, porque nunca había visto nada como esto. El simple hecho de tener una parte de la ciudad cerrada sólo para los olímpicos es algo que me deja alucinado.
He visto poco, porque llegué ayer por la tarde, pero esta ceremonia me ha dejado los pelos de punta y estoy muy emocionado de estar aquí.
Lo conozco del año pasado. La montaña es increíble, tiene pistas a los dos lados. Es muy bonita, trazada entre pinos. Es realmente impresionante".
Regino, nacido en Ceuta pero afincado en Málaga, recibió la notificación de que sería olímpico unos diez días antes de viajar. He visto poco, porque llegué ayer por la tarde, pero esta ceremonia me ha dejado los pelos de punta y estoy muy emocionado de estar aquí.
Lo conozco del año pasado. La montaña es increíble, tiene pistas a los dos lados. Es muy bonita, trazada entre pinos. Es realmente impresionante".
"Yo esperaba venir, pero hasta que no te lo dicen no lo sabes con total seguridad. Me salió una sonrisa y la verdad es que es increíble el hecho de poder participar en unos Juegos con 18 años. Estoy en una nube ahora mismo.
"El objetivo es ganar, la medalla ya está en casa", manifestó sin tapujos el novel deportista de la Real Federación de Deportes de Invierno (RFEDI), que antes de llegar a Vancouver, perfiló su preparación en Sierra Nevada (Granada) junto a su técnico, el suizo Kaspar Stenz, que también estuvo presente en la divertida ceremonia de izado de bandera, que España compartió con China Taipei.
