Así se mostraba Adriana Blake, Directora de Márketing de la estación al hacer un primer balance de lo que ha significado dejar entrar a los snowboarders a sus pistas. Y es que Taos Ski Valley, una de las pocas grandes estaciones controladas todavía por la familia fundadora, se resistió durante sus 55 años de historia a que este colectivo se deslizara por sus instalaciones. Pero un buen día el abuelo Ernie Blake, fundador de Taos, decidió que ya era hora de dar paso al snowboard.
Así que el 19 de Marzo pasado, pocas semanas antes de que se acabara la temporada, se dejó entrar a los snowboarders. Tal fue el revuelo que la noche previa a la apertura ya había gente durmiendo frente al remonte para ser los primeros en la historia de Taos en subirse a un remonte con una tabla de snowboard. Ha pasado un año de todo aquello y el balance no puede ser mas que espectacular.
Adriana Blake, nieta del fundador, cuenta que su estación es la única de la zona que ha incrementado usuarios "alrededor de un 15%, cuando el resto de estaciones han disminuido" y que el ambiente se ha vuelto más joven. Y eso que llegar a Taos no es fácil. No hay una gran ciudad cerca y el acceso se hace por una carretera bastante escarpada. Pero aún así han llegado familias con hijos que hacían snowboard "hemos tenido la escuela a tope toda la temporada", afirma Blake.
Respecto a la cantidad de snowboarders que han tenido, ella piensa que acabarán en un 18-22% del total de usuarios, "es curioso, como no sabíamos como contar la cantidad de snowboarders frente a los esquiadores, cada hora salía afuera alguien de administración y contaba los que habia. Unos días eran el 50% y otros apenas el 2-3%".
No solo el ambiente es más joven, sino algunos empleados para la escuela, los shappers para el snowpark que han montado, y hasta en el bar. Algunos de los riders decidieron salir a las pistas a deslizarse, fuera de los módulos "y no pasó nada!. Los esquiadores no han mostrado queja ninguna, y afirman que es algo que tenía que pasar tarde o temprano" afirma esta Directora de marketing que añadía que estaban temerosos por esta cuestión, ya que algunos clientes decían el año pasado que no vendrían si entraban snowboarders, "pero si no han venido si lo han hecho otros. De hecho acabaremos la temporada con alrededor del 15% de mas visitas".
Ahora solo quedan otras tres estaciones donde no se permite la entrada de snowboarders: Alta Ski Area y Deer Valley Resort, las dos en Utah, y Mad River Glen en Vermont. Se dice que la primera de ellas acabará por ceder ya que está unida a Snowbird, que si permite el snowboard. Mad River no pasa por un buen momento económico, por lo que también tiene que acabar cediendo tarde o temprano.
Deer Valley en cambio podría quedarse igual que siempre, ya que su salud financiera está bien, y ha sido elegida como la mejor estación de esquí de Estados Unido. No por los snowboarders, pero sí por los esquiadores...