Un Juez culpa al instructor del accidente del alumno
La indemnización por daños y perjuicios no se ha determinado aún, pero puede ser millonaria. Para llegar a esta conclusión el Juez entrevistó a numerosos testigos y expertos, así como la propia estación de esquí. Se llegó a la conclusión de que Anderson perdió el control y se dio contra un árbol en la parte inferior de la pendiente. La cuestión es de si el profesor tenía que haberse percatado de que la pendiente era demasiado difícil para su alumno, quien había esquiado dos veces anteriormente en esa estación, su experiencia en el esquí era de unas semanas y en el fuera pista un par de clases. La pendiente era de entre 22 y 29 grados ,había arboles y nieve polvo. Un peligro claro para un esquiador de sus características.
Según el Juez, que tuvo duras palabras contra el instructor, "no supo poner bien el ojo en su alumno", aunque suavizó el tema afirmando que otros muy buenos médicos, arquitectos o abogados también tuvieron su mal día en algún momento de su carrera profesional. De todas maneras, parece que el alumno había expresado su falta de conocimiento del fuera de pista, aunque por otra parte insistió en bajarla. Quizás el profesor se lo tenía que haber impedido.
Esto no significa que ahora cualquier persona que tuvo un accidente pueda culpar a su profesor, pero si que puede traer consecuencias en la industria del esquí, que ha mostrado su preocupación a pocos días del inicio de la temporada. Los profesores no pueden saber el estado físico de cada alumno en cada momento, según afirman fuentes del sector como Arnie Wilson, editor de Ski+Snowboard, que añade que a menudo los alumnos se pueden atascar ante una pendiente, pero nunca pueden ser obligados a descender. Aún así, desde otros sectores se preguntan donde se puede esquiar sin riesgos. Cualquier pista azul, verde o infantil, puede tener un árbol donde un mal golpe puede causar un grave accidente, "el esquí requiere un 100% de concentración el 100% del tiempo"
Jerome Portejoie, el instructor, ya se ha puesto en contacto con su compañía de seguros, quien se hará cargo del 100% de la indemnización, pero aún así, es quizás la primera vez en que se culpa al profesor de una mala práctica o fortuna del alumno. El caso entero con más detalles se puede leer en este enlace.