Esta reducción viene dada por las quejas que el cónsul de Canillo y presidente de Ensisa (gestora de Soldeu-el Tarter), Enric Casadevall, presentó al último Consejo de Administración de Nevasa, apuntando que se tenían que equiparar la cifra de forfaits que Canillo y Encamp recibían, puesto que las dos estaciones participaban por mitades en los beneficios de Grandvalira.
Se ha de tener en cuenta que los forfaits que recibía Canillo hasta la temporada pasada eran 300, mientras que a Encamp iban destinados 1.200 pases de temporada. Tras discutir esta demanda del presidente de Ensisa, se le ofreció a Casadevall aumentar la cifra de forfaits a la de Encamp, oferta que el cónsul de Canillo declinó, debido a que sobrarían demasiado pases de temporada. Así, pues, el Consejo de Nevasa, tomó la determinación de reducir el número de forfaits de Encamp a 300, equiparando la cifra con la de Canillo.
Antecedentes
Fuentes consultadas apuntan a que los motivos que hicieron al presidente de Ensisa presentar esta demanda, vienen de meses atrás, cuando recibió una carta del Comú d’Encamp firmada por el cónsul Miquel Alís dónde manifestaba que los niños de Canillo que estudiaban en la parroquia, no recibirían las diversas subvenciones que los niños d'Encamp sí reciben, y que estas subvenciones deberán salir de las arcas de Canillo. La corporación canillenca que subvenciona indistintamente a niños de la parroquia como los que residen en otras, quiso tomar medidas al respeto y pidió al Consejo d’Administración esta equiparación de número de forfaits, hecho que hasta el momento, el Común de Canillo había pasado por alto.
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