El zarauztarra Ibon Idigoras competirá mañana en Turín. Lo hará en la prueba de snowboardcross, una especialidad que se estrena en unos Juegos Olímpicos invernales. Nunca antes una Olimpiada de invierno había acogido a estos deportistas. El snowboarder guipuzcoano tiene 26 años y llega como él mismo dice “sin presión”, pero sí con el ánimo de competir “al máximo nivel”.
Para Ibon todo esto “es un sueño que estoy cumpliendo”. Un sueño que hasta hace poco se tornó en pesadilla, porque tanto él como otros deportistas de la expedición estatal se han dedicado, desgraciadamente, más a buscar sus equipajes extraviados en el vuelo Madrid-Turín que a entrenar. A Ibon Idigoras le ha pasado un poco de todo en los días que lleva en la Villa Olímpica. “Lo cierto es que he estado muy ocupado solucionando los problemas de la pérdida de las tablas. Ha sido todo bastante lamentable porque nos han tenido en un grado de incertidumbre importante, pero ahora sólo pienso en la competición, en hacerlo lo mejor posible y en disfrutar de esta experiencia que es única”.
Por fin el día 'D'
Mañana tiene una cita con la elite de este deporte. Iker Fernández no tuvo excesiva suerte en su modalidad de 'Half Pipe' y su puesto final se quedó muy lejos de lo que el propio deportista esperaba. Ahora le toca el turno a un Ibon Idigoras que espera “pasar la primera criba y luego ya veremos hasta dónde se puede llegar”.
Para pasar la primera ronda, Ibon debe quedar primero o segundo de los cuatro participantes que le tocarán en su serie. No será fácil, aunque el guipuzcoano ya ha destacado en las pruebas de la Copa del Mundo, siempre entre los 30 mejores. De hecho, su sexta plaza en Oregón le dio el pasaporte para ser olímpico. Está claro que unos Juegos Olímpicos son diferentes porque participan sólo los mejores. Según comenta Ibon “nunca sabes lo que te puede ocurrir en tu circuito, pero lo normal es que todos los mejores se metan en el 'top ten'”.Un minuto para la gloria
El snowboardcross es una carrera de un minuto aproximado de duración que combina la técnica alpina 'giros y deslizamiento' con la habilidad acrobática 'saltos y recepción' del freestyle. Se disputa en una pista sinuosa, con curvas aperaltadas y diferentes saltos intermedios. En cada manga participan cuatro snowboarders y sólo los dos primeros pasan a la siguiente ronda. Ibon Idigoras tiene claro que “busco el mejor resultado posible. Creo que si doy el máximo y no tengo ningún contratiempo en forma de caída, puedo estar entre los 16 primeros”.
Al combinar la práctica de este deporte con los estudios, Ibon no es un profesional que le dedique todo su tiempo al snowboard. Sin embargo, está entre los 30 mejores del mundo. Su momento actual es de optimismo y responsabilidad. Quiere hacerlo muy bien, aunque sabe que no se debe presionar en exceso. “Estoy en una forma física muy buena y llego tras obtener buenos resultados, por lo que si consigo disfrutar de una buena carrera puedo pasar a cuartos”. Una buena carrera para un snowboarder pasa por no salirse del circuito, por no caer y por salvar los obstáculos de la forma más rápida posible.
Su preparador físico es Jon Karla Lizeaga, ex atleta y compañero, además de entrenador, de la pertiguista donostiarra Naroa Agirre. A él le debe Ibon Idigoras parte de su buena forma. “Me ayuda mucho y me lleva toda mi preparación física, al igual que José Sánchez, que es el preparador físico de la Federación Española de Deportes de Invierno. Junto a ellos y al suizo Kaspar Stenz, técnico de la Federación, estoy progresando mucho”
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