La estación de
Alto Campoo, en Cantabria, dispone de
23 kilómetros esquiables, a los que hay que sumar otros 2,5 del circuito de fondo. Permanecen operativos sus 13 remontes mecánicos -cinco telesillas y ocho telesquís- que dan acceso a 19 pistas, de las cuales cuatro son verdes, siete azules y ocho rojas. Los espesores, de nieve polvo y primavera, oscilan entre 60 centímetros y un metro de altura.
Por su lado,
Leitariegos, en León, dispone de
3,5 kilómetros esquiables, repartidos en cinco pistas, mientras que las instalaciones gallegas de
Manzaneda ofrecen a los aficionados otros
3,5 kilómetros, con cinco pistas y tres remontes abiertos.