El Gobierno de Cantabria no se pronunciará por el momento sobre la posible creación de una estación de esquí en San Glorio mientras no exista un proyecto como tal y en tanto el mismo no supere todas las tramitaciones precisas en Castilla y León, ya que el 80% de las 1.400 hectáreas de terreno que ocupará corresponden a las provincias de León y Palencia.
Según subrayó ayer el consejero de Cultura Francisco Javier López Marcano, en respuesta a dos preguntas formuladas en el Pleno del Parlamento por el grupo Popular, el Gobierno regional aún no ha realizado “gestión alguna” al respecto porque no se le ha presentado “ningún proyecto”, sino únicamente una “idea”, planteada por la sociedad Estación de Esquí Tres Provincias.
Como respuesta a esa idea presentada al presidente regional y a los consejeros de Presidencia, Ordenación del Territorio y Urbanismo; de Medio Ambiente; y de Cultura, Turismo y Deporte, el Gobierno ha respondido a sus impulsores que acudan en primer lugar a la comunidad vecina y cuando cumplan allí todos los trámites y requisitos y tengan un “proyecto básico”, su propuesta será analizada en Cantabria desde una “perspectiva global”, según aclaró López Marcano.
El consejero salió así al paso de las críticas de la diputada del PP María Luz Lerín, quien lamentó que se desconoce la “postura oficial” del Gobierno de Cantabria sobre dicha estación de esquí.
Una estación que, por otro lado, suscita el rechazo de algunas asociaciones ecologistas, que aprovecharon el debate de ayer en el Pleno para concentrarse frente al Parlamento, donde una veintena de personas convocadas por Ecologistas en Acción y ARCA, permanecieron durante media hora con una pancarta en la que se leía No a la estación de esquí de San Glorio.
Para el grupo Popular no se sabe si el Ejecutivo apoya el proyecto tal y como, según dijo Lerín, manifestó en una rueda de prensa el alcalde de Vega de Liébana, el regionalista Armando Cuesta; o si por el contrario lo rechaza, como cabría suponer a juicio de la diputada, teniendo en cuenta que el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, no asistió este fin de semana a la romería organizada en la zona.
En cualquier caso, la diputada popular demandó un “trabajo empírico y riguroso” en este asunto, en vez de “palabrería”, y puso el ejemplo de la Diputación de León, que, según indicó, ha destinado 420.000 euros para elaborar distintos informes sobre el proyecto. Por otro lado, en la sesión plenaria se retomó el debate sobre el superávit de 47,49 millones de euros registrado en la ejecución presupuestaria de 2003, a propósito de la votación de una moción subsiguiente a una interpelación, rechazada por PSOE y PRC, por la que el grupo parlamentario Popular pretendía instar al Gobierno regional para que en el presente ejercicio no se produzca “el mismo sinsentido”.
Ese rechazo a la moción lo atribuye el diputado del Partido Popular Juan José Fernández, bien a que el Ejecutivo cántabro “conscientemente va a seguir generando superávit” o a que “no se sienten capaces de comprometerse a que no les vuelva a pasar involuntariamente”.
Sin embargo, desde el PSOE, su portavoz, Martín Berriolope, acusó a Fernández de tener “amnesia selectiva” y le recordó los 53 millones de euros de superávit del año 2002, en el que el diputado del PP era consejero de Economía.
En este mismo sentido, el portavoz regionalista, Rafael de la Sierra, recordó también el superávit de 2002 y criticó la “gestión totalmente ineficaz” del entonces consejero de Economía, Juan José Fernández, al tiempo que le advirtió de que “algún día” hablarán de “la dudosa tramitación” de algunos expedientes en dicha Consejería.
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