Valgrande-Pajares y San Isidro están sin nieve desde hace más ocho días. La estación asturiana tuvo que cerrar el pasado lunes, día 15, la única pista que aún permanecía en funcionamiento en la zona alta. El complejo leonés había cerrado ya un día antes.
El temporal de anteayer no dejó la nieve suficiente como para reabrir las pistas de ninguno de los dos complejos a los que acuden habitualmente los esquiadores asturianos y leoneses.
En Pajares aseguran que hace falta un poco más de nieve para poder trabajar las pistas de la zona alta, las únicas que por el momento han abierto en lo que va de temporada.
En San Isidro recordaron que las precipitaciones de los últimos días han sido mínimas y acompañadas de viento. Las condiciones de temperatura y humedad tampoco han permitido aprovechar toda la capacidad de los cañones de nieve artificial.
A LA EXPECTATIVA
Las reservas hoteleras están copadas, tanto en Pajares como en San Isidro, por gallegos y portugueses. Por el momento aún no se han registrado cancelaciones masivas. El director de Valgrande, José Miguel Vega, explicó ayer que "la gente está a la expectativa, esperando a ver si nieva".
En San Isidro, el responsable de explotación de la estación, Angel Regalt, aseguró que "si no hay nieve, siempre se produce un índice de cancelaciones importantes, pero no exagerado, porque los clientes encuentran en la zona alternativas a la nieve".
La presencia de esquiadores llegados de Galicia y Portugal es habitual desde hace años en San Isidro y en los alojamientos de las vertientes asturiana y leonesa. Este año, la estación leonesa ha registrado un incremento de visitantes de Madrid y Castilla y León, motivado posiblemente por la mejora de las comunicaciones. En Valgrande, la campaña de promoción desarrollada en los últimos meses en distintos puntos de Galicia y en las ciudades portuguesas de Lisboa y Oporto, ha permitido aumentar la presencia de esquiadores procedentes de estas zonas.
Tras la exitosa temporada vivida el pasado año en ambos complejos, este invierno está hasta el momento condicionado por la escasez de nieve. Las dos estaciones abrieron sus pistas una semana después del inicio oficial de la temporada y lograron salvar el puente de la Constitución, para el que tenían numerosas reservas, aunque con escasos kilómetros esquiables. Sin embargo, llevan más de una semana sin nieve.
Pese a los resultados, en San Isidro consideran que el balance es favorable hasta el momento, ya que han vendido 4.100 pases anuales, casi un 15% más que el pasado invierno. En Pajares aseguran que la cifra de forfaits es aún baja "porque la gente está esperando a ver si nieva".
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