8 de cada 10 ingleses, volvería a Arinsal

El 80% de los 600 turistas ingleses que el pasado invierno pasaron las vacaciones en Arinsal y respondieron una encuesta promovida por la Asociación para la Promoción Turística de Arinsal y Erts recomendarían la visita y repetirían la experiencia. Esta es una de las principales conclusiones de la consulta de los restauradores de la zona, que pretendian saber que piensan sus clientes de aspectos como la calidad y servicios de que dispone el pueblo, el servicio que reciben de los establecimientos donde están alojados o las ventajas e inconvenientes del viaje desde Londres.

El presidente de la asociación de promoción turística, Toni Coromines, explicó ayer que están satisfechos de la respuesta obtenida. Repartieron mil encuestas, de las que se devolvieron un 60%. La impresión que se llevan los turistas ingleses, que son mayoritarios en Arinsal, es muy satisfactoria. No obstante, hay puntos oscuros muy unánimes. El principal es el dèficit de transporte de enlace con la Masana y, por extensión, con las parròquias centrales del país.

Según Coromines, los turistas tienen la sensación “de que llegan a Arinsal y se pasan una semana tirados. Los turistas se quejan de la dificultad de encontrar microbuses, y del desesperante tiempo de espera” . Tampoco les satisface el servicio de taxi, “que consideran abusivo y que también necesita de largas esperas. En resumen, que se sienten aislados” .

Otro aspecto negativo se refiere a la estación de esquí. Encuentran pequeña la zona de debutantes y, además, “se quejan de que la mayoria de trabajadores no hablan Inglès. Y esto es una dificultad evidente cuando has de dar una instrucción básica a alguien que está aprendiendo a esquiar” .

Hace pocos dias, la asociación se reunió con el cònsol de la Massana, Antoni Garrallà, para exponerle sus inquietudes. El cònsol explicó a los responsables de la entidad que “en el ámbito parroquial poca cosa se puede hacer con relación a los autobuses” . Sobre el servicio de taxi, Garrallà expuso a los restauradores de Arinsal “la posibilidad que en la Massana haya una parada fija” , hecho que reduciría la distancia y el tiempo de espera. El cònsol se comprometió a exponer esta posibilidad a los responsables gobernamentales correspondientes. Coromines valora positivamente esta iniciativa. El cònsol major también manifestó a los promotores turísticos de Arinsal la posibilidad que se hagan cargo de un servicio privado de autobuses.

Toni Coromines recordó ayer la idea, por ahora descartada, de poner en marcha un tren turístico de enlace permanente entre el pueblo y la Massana. Por ahora, no han profundizado en el tema. Y ja no lo harán hasta el año próximo, cuando esté el nuevo comú.