Una orden del Ministerio de Administraciones Públicas, fechada el pasado 27 de marzo, zanjó el polémico deslinde del puerto de Leitariegos entre los términos municipales de Cangas del Narcea y Villablino. Los terrenos, importantes para la ampliación de la estación de esquí, llevaban años en disputa. Para defender los intereses del concejo, el pleno ha recurrido a los servicios del procurador José Ignacio de Noriaga Arquer, que ayudará en el caso a la asesora jurídica municipal, Nancy María Solar Sánchez.
ARGUMENTOS
Los concejales cangueses encuentran múltiples motivos para rechazar la resolución del Gobierno. Según la corporación, la disposición ministerial no tiene en cuenta la postura defendida por el ayuntamiento y el Principado. Por el contrario, acepta de pleno el informe con la propuesta de deslinde elaborado por el Instituto Geográfico Nacional, que Cangas encuentra discutible hasta el punto de desacreditarlo por estar "elaborado por un técnico prácticamente sin bajarse del coche. No va más allá de unas cuantas líneas sobre un plano".
Ediles del PP y del PSOE no dudaron en unirse para la defensa de la postura municipal. Coincideron en señalar que los más viejos de toda la zona recuerdan perfectamente dónde estaban ubicados los mojones 8 y 9, "ahora misterisamente desaparecidos". Sin embargo, el ayuntamiento sostiene que se conoce su ubicación en relación con otras referencias geográficas, como una fuente y un pico, utilizadas antaño en lugar de las coordendas actuales.
El portavoz popular, Joaquín Fernández, que se despedía como concejal, ya que no se presenta a la reelección, precisó: "Los deslindes que año tras año se han venido efectuando en la zona para los pastos coinciden con las propuestas de Cangas, y es muy chocante que nunca antes se haya reclamado nada desde Villablino".
El concejal abunda aún más en su argumentación y coincide con el alcalde al explicar que hay vecinos del Puerto que siempre han tenido sus captaciones de agua, hasta donde la memoria les alcanza, en la zona que ahora se atribuye a Villablino y que siempre había sido considerada canguesa.
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