El eslalon de ayer fue especialmente competido, con muchos abandonos y descalificaciones, entre estas últimas las del catalán Albert Rovira, que se saltó una de las últimas puertas en la primera manga.
Ivica Kostelic, un gran especialista de eslalon que esta temporada ha fanado tres pruebas de esta modalidad en la Copa del Mundo, dominó desde la primera manga. En la segunda bajada remató la faena, colgándose el oro, y dejando la plata para el joven suizo Silvan Zurbriggen, primo del antiguo campeón Pirmin Zurbriggen, y el bronce para el italiano Giorgio Rocca.
Hecho histórico
Nada más cruzar la meta, Ivica se fundió en un abrazo con su hermana Janica, que en este Mundial se ha proclamado campeona de combinada y eslalon. Es la primera vez en la historia que dos hermanos ganan la misma prueba en un campeonato del mundo.
“Me ha inspirado Janica”, dijo Ivica. “Esto es un sueño, uno de los días más grandes de mi vida, lleno de emociones”. El esquiador de Zagreb reconoció que “ha habido que luchar al límite, he tenido que arriesgar mucho”.
Con esta victoria Ivica Kostelic repara la decepción que sufrió en los JJ.OO. de 2002, cuando era uno de los favoritos pero se salió.
El estadounidense Bode Miller, que esperaba redondear su buena actuación en el Mundial tras los oros en gigante y combinada, se quedó sin opciones al perder uno de los bastones en la primera manga. Finalmente acabó sexto
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