En Manzaneda están satisfechos con la temporada actual.

La climatología adversa de los últimos días ha impedido la práctica de esquí en la estación de invierno de Manzaneda durante estas fechas navideñas. Sólo el pasado fin de semana se abrieron las pistas para recibir a los amantes del deporte blanco que ansiosos esperaban la llegada de las primeras nieves.

En lo que va de temporada (comenzó el 29 de noviembre y finaliza el 20 de abril), las pistas de esquí sólo se abrieron diez días para la práctica deportiva. Sin embargo, desde la estación de Manzaneda se muestran satisfechos con el ritmo que sigue el invierno en las cumbres gallegas.

De hecho, explican que este pasado fin de semana sólo abrió en el noroeste peninsular la estación de Manzaneda, permaneciendo cerrada la estación vecina de San Isidro.

La lluvia es la peor enemiga de la nieve y hasta ahora la humedad no ha permitido la formación de capas gruesas de nieve. Tanto el sábado como el domingo, los usuarios pudieron disfrutar únicamente de 800 metros de pista con nieve de 10 a 15 centímetros de grosor.

No obstante, desde la estación de Manzaneda se muestran satisfechos con la demanda de usuarios a nivel turístico. La ocupación en estas fechas navideñas oscila entre el noventa y el cien por cien, con el aforo completo para esta Nochevieja. De hecho, la estación de invierno ofrece otra alternativa a la gran fiesta de fin de año con cena para 260 comensales, ya cubierta.

Según explicaron desde la dirección, el 95 por ciento de los clientes que ha reservado plato son de nacionalidad portuguesa, algo habitual en estas fechas.

Con todo, Manzaneda espera un cambio en la climatología a fin de poder utilizar también las pistas deportivas, ya que la humedad ambiental impide también el uso de los cañones de nieve artificial.

La temperatura máxima registrada ayer era de 7 grados, con mínimas de dos, cielos muy nubosos y visibilidad regular.

Así las cosas, la estación se mantiene abierta para uso turístico con una amplia variedad de actividades para realizar.