Aramón SA, la empresa formada a partes iguales por Ibercaja y la DGA para explotar Formigal, Panticosa, Cerler, Valdelinares y Javalambre, afronta su primera temporada El hólding aspira a multiplicar la oferta turística.
La mayor parte de las estaciones de esquí aragonesas estrenará este año modelo de gestión. La principal novedad de la nueva temporada, que arrancará a primeros de diciembre, no estará en las pistas, sino en los despachos, ya que Aramón, la empresa que nació en mayo con el popular sobrenombre de hólding de la nieve , está a un paso de afrontar su primer ejercicio después de recorrer un sinuoso camino administrativo en el que el Gobierno de Aragón e Ibercaja han sumado las participaciones que tenían en las distintas estaciones para crear un órgano de gestión único: Montañas de Aragón SA.
El objetivo es potenciar al máximo el turismo de Aragón en todas sus vertientes tanto en el ámbito nacional como en el internacional mediante un proyecto planificado que será presentado en breve. Las distintas iniciativas que ya maneja Aramón no se centran sólo en la explotación de las pistas de esquí, sino en un "ambicioso programa globalizado" que abarca inversiones en las distintas modalidades turísticas del Pirineo aragonés y de Teruel.
Aramón es, en definitiva, un hólding participado al 50% por DGA e Ibercaja que asume la gestión absoluta de Panticosa Turística, Formigal SA, Nieve de Teruel y Fomento y Desarrollo del Valle de Benasque (Cerler). Las otras dos estaciones de esquí que existen en la comunidad aragonesa, Candanchú y Astún, siguen en manos privadas y al margen de este proyecto, aunque "con la constante invitación" de estudiar su entrada en el mismo, según la DGA.
Como presidente del consejo de administración (16 personas) y también de la comisión ejecutiva (seis) encargada de la gestión directa de Aramón aparece Alfredo Boné, actual director general de Administración Local y Política Territorial. La figura de Boné, un hombre de plena confianza del vicepresidente aragonés, José Angel Biel, ha surgido del consenso de todas las partes.
Seis de los miembros del consejo han formado el grupo de trabajo operativo que se encargará de la gestión más directa: Alfredo Boné, Alain Cuenca y Miguel Gracia, por el Gobierno, y Francisco Bono, José Francisco Bergua y Luis Gracia, por la entidad de ahorro. Los seis forman el núcleo principal de cada uno de los consejos de administración de las distintas empresas del hólding. En cada uno de ellos se repiten también las figuras del secretario (Francisco Serrano Gill de Albornoz) y del vicesecretario (Javier Blecua).
Las caras nuevas en los distintos consejos las protagonizan los representantes de los ayuntamientos de Panticosa (Luis Guillén), Benasque (José Marión), Sabiñánigo (Carlos Iglesias) y Sallent (Pascual Royo y Antonio Urieta), y de la Diputación Provincial de Teruel (Juan Miguel Ferrer). En la junta de Formigal SA aparece también Fernando Vicente, exdirector adjunto de Ibercaja.
El reto que tiene por delante tanto la DGA como la entidad de ahorro es "apasionante", según los responsables consultados. El equilibrio de acciones confiere a esta sociedad una situación muy particular. La gestión de Aramón va a exigir de ambas partes un ejercicio de consenso continuado en un sector estratégico para la economía aragonesa, lo que ya permite intuir a los analistas la importancia de esta iniciativa, por el precedente que puede establecer. Son muchas las voces que ya ven en Aramón un ejemplo para la creación de futuras sociedades donde los capitales privado y público se sitúen también al 50%.
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