Malbun es una pequeña aldea que se encuentra al final del valle de Malbuntal. El acceso se realiza a través de una carretera de montaña de unos 10 km. que se encuentra a la salida de Vaduz en dirección a Suiza.
Cuentan las leyendas que en el pasado este sitio solía pertenecer a los fantasmas, supongo que por lo aislado que se encontraba, sin embargo en la actualidad es un centro animado, tanto en invierno como verano, gracias a las numerosas familias que prefieren disfrutar de sus vacaciones en un lugar tranquilo y sin tráfico.
La estación ofrece 23 km. de pistas, con unas cotas que van desde los 1.600 del pueblo hasta los 2.000 en la zona alta de Sareis.
Los trazados son bastante sencillos y aunque en el mapa se vean todos los niveles de pistas hay que bajarlas de color. Los remontes son básicamente 3 sillas y algun teleski que se utiliza de aprendizaje, pero como no tiene mucha afluencia de aficionados, estos remontes sirven de sobra para pasar una jornada o en mi caso una visita rápida cuando me dirigía hacia la región de los Grisones
El pueblo es pequeño, contando con cuatro hoteles y varios chalets privados, estando todos a pie de pistas, siendo recomendado para las familias que buscar un sitio comodo donde disfrutar con los pequeños de un entorno natural nevado.
Vamos a dejar algunas fotos de mi visita vespertina a la estación del Principado.
La visita fue bastante rápida, pero merecía la pena poder conocer esta peculiar estación en uno de los países mas pequeños del mundo.
Como curiosidad, a unos 20 km del desvió de Vaduz a Malbun se encuentra el pueblo de Maienfeld, ya en territorio de Suiza. En este pueblo se inspiró la novela de Heidi escrita por Johanna Spyri. Los más nostálgicos de la famosa serie infantil, pueden visitar las recreaciones de los diferentes lugares en los que transcurría la vida de la pequeña y sus amigos en este rincón de los Alpes.