Con el artículo de hoy, damos por comenzado el GRAN TOUR INTERNACIONAL de esquí de los Gatos 2024. Este año en nuestro grupo recreativo deportivo, tenemos el placer de realizar varios viajes. Uno de ellos será el clásico viaje de una semana a los Alpes, en el que toda la tropa gatuna viaja en masa (este año somos 65 personas). Hay otro viaje intercontinental, del cual no voy a desvelar aún el destino, pero es desde luego un lugar soñado por todos, y el plato fuerte de la temporada. Pero el artículo de hoy trata de un primer viaje inicial. En este caso viajo solo yo y mi familia. En total serán 3 viajes consecutivos, empalmando aviones, con lavadoras de ropa sucia y viajes en coche. Esto va a ser increíble, aunque también podría salir algo mal. Es arriesgado 3 viajes consecutivos, una lesión/enfermedad o un retraso de un vuelo, podría arruinarte la planificación. Pero bueno, eso ya lo veremos. No es la primera vez en mi vida que empalmo viajes, aunque si 3 viajes de este calibre juntos.
Vistas desde el avión sobrevolando los Alpes.
En fin, vamos al lío, seguro que tenéis ganas de que os cuente cosas de Laponia, ¿verdad? Pues sí, este ha sido el lugar que he viajado con la familia. Increíble lugar por cierto.
Detalle de nuestro alojamiento de AIRBNB y el coche de alquiler
Soy muy fan de los países nórdicos. Ya visité en el pasado Islandia, Noruega, Suecia y Dinamarca, pero siempre lo he hecho en la época estival. Me faltaba visitar el más lejano de la península ibérica: FINLANDIA
Detalles de una carretera principal cualquiera
Claro que, esta vez tocaba ya hacerlo en invierno. Aquí, a la Laponia finlandesa, se viene principalmente a hacer el típico turismo invernal, que muchos de vosotros habréis visto por televisión, redes sociales o incluso, lo habéis vivido ya. Ciertamente es un viaje soñado por todos los viajeros de todo el mundo. Cualquier buen viajero que se precie, tiene en su agenda visitar alguna vez en su vida estas tierras del Círculo Polar Ártico. En mi caso, se había hecho mucho de rogar y por diferentes motivos todavía no había podido conocer, unas veces por falta de economía (es un viaje caro) y otras por circunstancias familiares o laborales.
Edificio de servicios en la base junto al telecabina
El caso es que este 2024 no se me podía escapar este destino con la familia, el cual llevaba persiguiendo varios años, y os voy a contar un secreto: incluso se me ha escapado alguna lagrimilla de rabia e impotencia, por varios fracasos de intentos de viaje aquí.
Techo de la estación de Levi, amaneciendo a las 10:30am
Cuando acabó la temporada de esquí pasada, en Mayo, como se suele decir vulgarmente, se me "hincharon las narices" y compré los vuelos a Rovaniemi (Finlandia). Todavía faltaban más de 9 meses pero, este tipo de viaje, o lo programo con tiempo y voy escalonando los pagos, o al final no lo consigo realizar. Parece que, te lo crees más y te mentalizas, si compras los vuelos y haces las correspondientes reservas de alojamiento y coche de alquiler. De esta manera ya te obligas a realizar ese viaje como sea.
Viajar a la Laponia se puede hacer de muchas maneras. En primer lugar hay que decir que la Laponia es una región que abarca nada menos que 4 países: Noruega, Suecia, Finlandia y también algo de Rusia. La región es enorme, pero los paisajes son muy similares. Estas regiones se encuentran en el norte de cada uno de esos países citados, con una particularidad muy importante, todas están dentro de la línea imaginaria del Círculo Polar Ártico. No debemos confundir el Círculo Polar Ártico, con el Polo Norte jeje. Gente que no es del mundillo de los viajes y de la nieve, muchas veces relacionan Laponia con el Polo Norte. Pero no jeje, el Polo Norte todavía está mucho más arriba.
Aunque tanto en Noruega, Suecia y Finlandia, la región de Laponia es similar y se hacen las mismas clases de actividades, lo cierto es que la finlandesa es la más original, ya que fue la primera en montar el "chiringuito" de las visitas a Papa Noel. Es por ello que quisimos viajar justamente aquí. El gancho de la Navidad perpetua que aquí se vive, fue uno de los puntos que queríamos experimentar, también por el hecho de viajar con una niña pequeña. Ya sabéis lo que significa para los peques conocer en persona a Papa Noel jeje, bueno, para los peques y los no tan peques.
Este viaje es caro, muy caro, si uno va a una agencia y contrata el típico paquete de todo incluido. Conozco familias que han pagado 9000 o 7000 euros, por un viaje a la Laponia finlandesa. La verdad es que me parece excesivo pagar tantísimo por venir aquí. Pero entiendo que, hay gente que le gusta viajar y despreocuparse de todo. Les gusta que les alojen en sitios espectaculares, les den de comer súper bien, les trasladen en vehículos taxis y que les incluyan todas las actividades habidas y por haber, aunque algunas de ellas sean un poco estafas jeje. No seré yo quien critique eso, porque cada cual viaja como quiere y está en su perfectísimo derecho. Pero pienso que, no hace falta gastarse tanto.
Vídeo de los exteriores de neustro alojamiento a las afueras de Rovaniemi.
Igual que esa gente se buscan unas vacaciones en verano y se buscan la vida para conseguirse un apartamento en primera línea de playa, también podrían haber hecho lo mismo con un viaje a Laponia.
No hay que tenerle miedo a organizarse un viaje por libre aquí a este destino, esto no es el Polo Norte. Aquí, a pesar de estar en el culo del mundo, todo está perfectamente señalizado, hay cobertura móvil en todas las carreteras mucho mejor que en España. La gente habla inglés perfectamente, las carreteras están muy limpias a pesar de la nieve y, los coches de alquiler, también están súper preparados, con neumáticos de invierno de clavos, que se agarran al hielo y nieve perfectamente.
Nuestro viaje nos habrá costado un total de 2000€ para 2 adultos y una niña de 10 años. De ellos 550€ costaron los 3 vuelos (Barcelona-Helsinki-Rovaniemi), 300€ el coche de alquiler con seguro a todo riesgo y 350€ por 6 noches en un alojamiento a las afueras de Rovaniemi, muy cuco, reservado en Airbnb. Los otros 800€ nos los hemos gastado en desplazamientos, actividades, forfaits, alquileres de material y el capricho de una noche en un hotel a pie de pistas, con su piscina, sauna y de todo lo que puedas imaginar.
Otro punto de ahorro es el tema de las fechas. Por el tema del Papa Noel, todo el mundo quiere viajar aquí en Diciembre y Navidades. En esa época los vuelos son más caros (sobre 100€ más por persona como mínimo) y los alojamientos baratos escasean. En esa época la Laponia está infectada de gente y tendrás que hacer cola para todo. Si quieres evitar semejante marabunta turística, te recomiendo viajar las fechas que hemos escogido nosotros, una vez acabada la navidad.
Bien, una vez dicho todo esto, es hora ya de empezar a narraros el viaje en si, que fue del 19 al 26 de enero 2024. Aterrizamos un viernes a las 22:30 de la noche en Rovaniemi, recogimos el coche de alquiler y conforme salimos del aeropuerto hacia el parking, los -25 grados nos dieron una bofetada en toda la cara. No podemos olvidar decir que este destino de viaje es extremadamente frío. Corriendo cogimos el coche, y conducimos apenas 15 minutos para llegar a nuestro alojamiento en Rovaniemi, la capital de la Laponia finlandesa.
Al día siguiente, sábado, daban cielos despejados, algo raro por estas latitudes en invierno. Así es que tenía que aprovechar la previsión. No es lo mejor llegar de un viaje tan largo, y sin apenas dormir, pegarte el madrugón y conducir dos horas para esquiar. Mi mujer y mi hija no estaban por la labor, pero yo tenía una misión, tenía que ir a esquiar como fuera a Levi, y hacerlo con sol, una oportunidad histórica!
Como si de una misión militar especial se tratase, cogí mis bártulos a los 8:00am y me dispuse a conducir esas dos horas que separan Rovaniemi de la estación de esquí de Levi. El trayecto se me hizo largo, porque todavía era de noche cuando salí del alojamiento y el termómetro marcaba la friolera de -29 grados. Además las carreteras nevadas y yo solo... pufff, era toda una aventura ártica jaja. Pero con la compañía de mis gatos por el grupo de whastapp, finalmente acabé llegando justo cuando el sol salía del horizonte. Recordamos que aquí en Círculo Polar Ártico, en esta época invernal, amanece sobre las 10:30 y a las 14:30 se esconde de nuevo el sol. Solo hay 4 horas de sol, bueno, si es que se puede llamar "día" a eso. Porque claro, el sol no gana altura, y se queda como cuando está tardeciendo, es como un atardecer perpetuo. El sol está bajito e incluso molesta al mirar porque te deslumbra. Pero en cambio, desprende una luz anaranjada que le da a todo un tono de color muy especial. Es lo que en fotografía llamamos la hora "dorada", un espectáculo de luz que todos los amantes de la fotografía buscamos y que aquí en Laponia lo encuentras todos los días, ojo, todos los días que esté despejado, claro, porque eso es también una rareza.
El caso es que ya desde lejos se me pusieron los pelos de punta de la emoción al ver la montaña de Levi, a las 10:00 de la mañana, toda la nevada pero de un color anaranjado por la luz del amanecer, y con los focos de las pistas enchufados. Impresionante.
Una vez allí, aparqué en el parking de la góndola, la de la pista de la Copa del Mundo. Allí no había ni dios, eramos 4 coches. No había ni taquilla y compré el forfait en una máquina expendedora. Las primeras bajadas, la ilusión me desbordaba. El sol tan bajito era un espectáculo para mis fotos, pero también para esquiar con esa luz.
Hay que decir que Levi, es la estación más internacional de Finlandia, un país que apenas tiene 10 estaciones de esquí. Aquí nieve tienen de sobra asegurada, pero buenas montañas son escasas. Laponia es muy plana, tan solo salpicada por algunas colinas. Levi está en una de esas pocas colinas, de apenas 350m de desnivel. Esquiar aquí nada tiene que ver a hacerlo en Pirineo, y mucho menos en Alpes.
Vídeo de esquí en Levi
En general las pistas son muy facilitas en Levi, salvando una pista roja y la pista de Copa del Mundo, el resto de pistas pues son muy facilonas, prácticamente podrían ser pistas verdes, aunque ellos las marcan como azules o incluso rojas a veces. Los remontes están bien en Levi, dos o tres telesillas, un telecabina y el resto ya telesquís. Abundan los telesquís en Finlandia, pero claro, para la poca afluencia de clientes, supongo que no les compensará montar telesillas a tutiplen.
La pista de la Copa del Mundo, si es verdad que tiene una pala muy inclinada, supongo que será la de mayor grado de inclinación de todo el país, aunque tampoco es nada del otro mundo. Pero emociona saber que por ella bajan cada año los mejores corredores del mundo de slalom.
Fuera pista también ahí, pocos pero ahí. Suelen ser también con poco desnivel, y entre árboles que parecen fantasmas, completamente blancos del viento y la nieve. Hay que decir que yo encontré la estación en muy buen estado. Los días previos había nevado bastante, por lo que la nieve era abundante y de buena calidad, pero, también estaba venteada, muy me dijeron que dos días antes de mi visita, tuvieron que cerrar la estación por temporal de viento y nieve. La cosa es que, la única ladera fuera pista que de verdad vi apetecible, fue una ladera poco trillada, que baja cerca de la pista de la Copa del mundo, y que al principio es blanca por completo y más tarde se suaviza la pendiente adentrándose en la línea de árboles. Fueron una bajadas freeride muy sabrosas y sin peligros de ningún tipo.
Hay que diferenciar las dos caras del dominio esquiable: la que pega el sol y la que queda en sombra. La que pega el sol es realmente la buena, primero por la luz y segundo porque además las inclinaciones son mejores. En la cara de la montaña en sombra, bueno pues sus pistas se podrían resumir en "poca cosa" y encima muuuucho frío. Al estar los cielos despejados, había inversión térmica. En la cota máxima de la estación al sol, hacía -12 grados, mientras que en la parte de sombra y en la base, el termómetro bajaba hasta los -23.
Fue a partir de las 11:30, cuando empecé a ver más gente esquiando por la estación. Aquí se ve que la gente no madruga. De hecho el horario de la estación cuando yo estuve, es de 10:00 a 19:00. Antes de las 10:00 es que todavía es de noche, por eso no abren antes. Las pistas principales están perfectamente iluminadas, y las luces están encendidas el tiempo que haga falta, normalmente antes de amanecer o cuando el sol ya se ha marchado, pero si está nublado, podrían tenerlas encendidas todo el día.
Respecto al paisaje, que decir, es brutal !! Desde aquí arriba puedes ver lo plana que es la Laponia finlandesa, y el horizonte brilla con una luz muy peculiar por el efecto del sol tan bajito.
Arriba en el techo de la estación, todo está repleto de nieve y hielo. La nieve se adhiere por el efecto del viento y el frío a cualquier elemento, ya sean árboles, hierro, paredes, carteles o lo que sea.
La nieve evidentemente es de una calidad excepcional, debido al frío ártico.
Aquí en pistas el hielo no existe, ni la nieve dura. Vamos a poder clavar cantos con seguridad y vamos a poder gozarla con nuestro mejor carving.
Entre pistas, se pueden hacer algunas bajaditas facilitas entre árboles, que siempre son un punto más de diversión.
Respecto al freestyle, hay que decir que tiene buenos saltos montados y buenas líneas de módulos. Se nota que aquí le dan prioridad a esto del freestyle, ya que sus pistas pues no son gran cosa (comparándolas con las de Alpes o Pirineos, por ejemplo)
Aquí en Levi, también se puede subir en la góndola en plan turista sin esquiar o se puede visitar una cabaña de madera donde vive Papa Noel y hacerte un selfie con él (curioso esto). También hay gente que sube a pasear con raquetas de nieve, y hay carriles especiales para motos de nieve, que también alquilan. Levi es un centro invernal de vacaciones internacional, y por ende ofrecen muchas actividades para realizar.
Las vistas son increíbles, es desde luego lo mejor de esquiar aquí.
Para mi es un sueño conocer Levi. Tantos años viendo las carreras de Copa del Mundo por televisión, y hoy por fin estoy esquiando aquí. Mi primera vez esquiando en Finlandia. Con este nuevo país ya son 11 en los que he esquiado de todo el mundo.
La gente que visita Levi, suele alojarse en Kittilä, que es una población con un aeropuerto pequeño, pero con vuelos diarios a la capital Helsinki.
Detalle en vídeo de Levi
El momento culminante del día, fue a las 14:20 cuando el sol estaba a punto de esconderse en el horizonte.
En esos instantes todo el cielo era rojizo y todo el mundo se paraba en pistas a hacerse selfies para inmortalizar el momento.
La verdad es que es muy curioso ver el sol ponerse en una estación de esquí.
Para ver eso en las estaciones de Alpes o Pirineos, no te queda otra que hacer esquí de travesía...
...o esconderte bajo un árbol al cierre de la estación para que no te tiren los pisters jeje. ¿de que me suena eso? XD
La luna aquí en Círculo Polar Ártico es muy visible, y bastante bajita también.
Como digo, a esta hora dorada todo el mundo estaba haciendo fotos.
Paisajes bárbaros.
Sin nadie en pistas
El sol naranja
Lugares de ensueño
Esquiar en Laponia es diferente a todo lo que he esquiado hasta la fecha, es desde luego algo mágico.
Asi es que nada, tras la puesta de sol decidí emprender el camino de regreso de otras 2 horas de coche hasta mi alojamiento en Rovaniemi. Esta vez el trayecto fue más ameno, con la moral por la nubes tras lo vivido en Levi, un sueño para mi el haber esquiado aquí, y encima con este espectacular día de sol sin nubes.
Ya dije que este era un viaje familiar, y por tanto, íbamos a realziar las típicas actividades que se hacen en Laponia. Y en esto incluyo, como no, la visita la Santa Claus Village, de Rovaniemi.
Se trata de un parque temático, en el que todo gira en torno a Papa Noel y la Navidad.
Aqui vamos a encontrar multitud de tiendas de souvenir, restaurantes, la casa de Papa Noel donde previo pago puedes hacerte una foto con el mismísimo Santa Claus, algo que a los peques les encanta y es algo imprescindible si se viene aqui.
Pero también está la casa de Mama Noel, la de los Elfos, la de las cartas a Papa Noel para los regalos... Aquí hay de todo y para todos, aunque no deja de ser un parque temático.
Nuestra casita de Airbnb en Rovaniemi, con garaje y sauna propia, y chimenea de leña.
Foto con el mismísimo Papa Noel.
Uno de los días lo dedicamos a hacer las típicas actividades.
Contratamos un pack de 450€ para los 3 en total, que
incluía, la visita a una granja de renos y una breve charla sobre ellos dond ete daban algo de picar y beber caliente, una vueltecita en trineos tirados por renos, otra en trineos tirados por perros y una hora de conducción en moto de nieve.
La duración de todo esto fue de unas 4 horas y los traslados fueron en furgonetas privadas.
Tuvimos un guía que justamente era de Altea (Alicante), el cual también era un gran aficionado a la fotografía, pero más aún de la auroras boreales. Evidentemente el tema auroras boreales era algo con lo que sonábamos ver, pero sabíamos que sería difícil ya que se tienen que dar muchas circunstancias.
Pero este guía, de nombre Rafa, que trabajaba para la empresa Artic Circle Snowmobile, me abrió los ojos y me animó a salir por la noche a buscar auroras.
Me dijo unas cuantas claves para tener éxito y bueno, ya os contaré en el próximo artículo como quedé.
Lo de las vueltecitas en trineos por perros o renos, pues la verdad, fueron muy poca cosa.
Más que nada para la foto y tener la experiencia, pero las vueltas fueron cortísimas...
...aunque pienso que es imprescindible hacerlo, porque es algo típico.
Vídeo paseo de renos.
Los perros siempre bonitos y bien educados.
Tania se los comía a besos.
Los 3 en el trineo, listos para que...
... estos perros nos den una vuelta.
Vídeo de la vuelta en trineo
Lo de la moto de nieve nos gustó mucho más. Es cierto que su conducción no es nada fácil, pues los esquís delanteros se encarrilan y la moto no tiene mucha estabilidad que se diga en las curvas. Pero bueno, al ser yo poseedor de una moto de agua, pues no se me dio nada mal la moto de nieve, le pillé el rollo rápido, en algo se asemeja a la moto de agua.
El trayecto tuvo una duración de una hora, con algún descanso. Y la verdad es que los paisajes y caminos que transcurre son increíbles.
Realmente todo los alrededores del Santa Claus Village, esta lleno de caminos para motos de nieve. Los caminos se adentran en bosques nevados con árboles cargadísimos de nieve. Se llega a perder la orientación de donde te encuentras, ya que hay decenas de caminos y cruces, y al ser todo bosques no tienes ni idea de como salir de ahí.
Evidentemente la excursión es guiada. Eramos un grupo de 4 motos, y tan solo debíamos seguir al guía. Las motos estaban limitadas a 40km/h, auqnue era suficiente para notar la sensación de velocidad, ya que los caminos estaba muy bacheados y no era muy cómodo circular por ellos.
Rafa el guía me comentó que lo más espectacular es conducir por nieve virgen.
Enseguida se me abrieron los ojos como platos jaja, y le dije que nos llevara. Nos guió hasta una explanada libre de árboles, que estaba virgen sin huellas, y muy bonito todo pero, llegaron los problemas. La moto del guía que iba abriendo huella se atasco varias veces, y otros clientes que iban por detrás nuestra volcaron y para ayudarles hubo que andar a buscarles más atrás, hundiéndote en la nieve casi hasta la cintura. Como digo la conducción en nieve virgen mola pero, no es nada fácil. El freeride es lo que tiene jeje.
Pero vamos que, lo bonito de la moto de nieve es sobre todo el entorno por donde circulas.
Todo esta lleno rinconces bellos cargados de nieve.
Vídeo ruta de moto de nieve
Pues esto es todo por hoy señores, en el próximo capitulo os contaré más cosas de esquí y de Laponia. Lo dejamos para la segunda parte. Nos os la perdáis que se vienen muchos fotones!
Hasta la próxima y recordad...SED FELICES!!
Muchas gracias enriquenieve !!
