Cómo ya hice el verano anterior, tocaba una escapada a Les Angles. La verdad es que hay pocas maneras mejores de pasar los veranos, en altura y en estación de esquí, y lo bueno del Capcir es que tenemos un pueblo en la misma estación.
Si os perdisteis el reportaje del anterior verano, en el que disfrutamos de rutas en bicicleta de montaña, algo de senderismo y también de paseos por el lago de Matemale y relax en el Angleo, os dejo el enlace para que lo podáis ver, tanto en texto como en vídeo.
La verdad es que hay tantas cosas por hacer allí que algunas nos quedaron pendientes, así que el primer fin de semana que teníamos libre, allí que nos escapamos para disfrutar de otras actividades con algo más de adrenalina que las anteriores.

Primero de todo pararíamos a alquilar unas bicis de descenso o enduro para poder disfrutar bien de las pistas.

Algunas de esas pistas se pueden hacer con una bicicleta de montaña normal, pero si hacemos a comparación con el esquí, sería la misma diferencia de esquiar fuera de pista con unos esquís de SL o con unos anchos de freeride, vamos, la noche y el día, así que si queréis probar esto del descenso (os lo aconsejo), no dudéis en alquilar las bicis específicas para ello.

Os dejo el vídeo enlazado para que podáis ver como son algunas de las partes de las pistas de DH, además de otras actividades que hicimos.
La verdad es que fue una mañana tremendamente divertida, nos lo pasamos como niños, además hay pistas para todos los niveles, desde verdes hasta negras, tanto para quienes no lo hayan hecho nunca como para los más exigentes.
Y después de la mañana de bici, terminábamos con una barbacoa en la sala Ours Sac, que como os comenté en el artículo del año anterior, es la sala dónde por la mañana llevas tu comida y te la hacen gratis, si sí, GRATIS!!!.
Después de comer, por fin podríamos hacer la bajada que el año anterior se nos resistió por lluvia, el descenso en el trineo del Lou Bac Mountain, un pedazo de experiencia ideal para disfrutar con la familia o amigos.


Es divertidísimo, aunque os tengo que decir que en invierno con todo nevado tiene que ser todavía más espectacular, a ver si lo pruebo también, jajaja.
Pero claro, después de una jornada tan ajetreada, no quedaba otra que ir a relajarse un poco en el Balneario Angleo, jajajaja, así que puesta de bañador, y a ponerse en remojo con las burbujas.

Menudo plan para una jornada verdad?
Pues todavía no terminaba. Tuvimos la suerte que ese mismo fin de semana hacían el famoso Correfoc, un espectáculo de fuego y petardos muy típico en Catalunya, y que en Les Angles también celebran y disfrutan, así que terminar la noche con fuego gracias a los Diables de Puigcerdà era la guinda para el pastel o, mejor dicho, la traca final para la jornada.

Todavía quedan algunos días de buen tiempo para poder aprovechar los pueblos y estaciones de los Pirineos antes de que se vistan de blanco, no os lo perdáis!!
Y como siempre os digo...