Como una subida complicada y en mal estado se define la Ruta G-21, que va hacia Farellones, y que a pesar de los múltiples anuncios y propuestas no se ha logrado mejorar. El último revés ocurrió este año cuando, ya asignada la licitación, el consorcio IcafalConpax desistió por problemas financieros.
Es el único camino para llegar a los centros de esquí, recintos que por el cambio climático acusan una creciente incertidumbre: así como este fin de semana viven los efectos del sistema frontal, hay semanas en que la nieve se derrite por las altas temperaturas.
Por esto, las temporadas corren el riesgo de ser cada vez más cortas, pese a los esfuerzos de los complejos turísticos. "Este año ha sido particularmente malo para los centros de esquí, debido a que estamos viviendo en la zona central el año más cálido jamás registrado. Las altas temperaturas registradas frecuentemente durante este invierno han derretido de forma anticipada la relativamente poca cantidad de nieve, caída por debajo de los 3 mil metros", afirma Raúl Cordero, experto en cambio climático de la U. de Santiago.
El académico añade que estos eventos "confirman una tendencia: durante las últimas tres décadas la zona central ha perdido, en promedio, un 30% de su cobertura nival (... ). Y este ritmo de pérdida podría acelerarse en los próximos años".
Con todo, el gerente general de Valle Nevado, Ricardo Margulis, asegura que la Ruta G-21 "fue construida hace más de 60 años, cuando Santiago tenía una población de 2 millones de habitantes. Hoy, la ciudad tiene 7 millones de habitantes, sin considerar los turistas extranjeros que suben a la cordillera en invierno y verano. Por lo tanto, no hay duda de que es necesario un nuevo camino con mejores estándares de calidad y seguridad para todos". ¿Prioridad? El urbanista Uwe Rohwedder, académico de la U. Central, postula que "en las circunstancias actuales, considerando los temas asociados al cambio climático, los eventos de lluvia-nieve están con una isoterma por sobre los 2.700 m, mientras que Farellones está a 2.340 m, El Colorado a 2.560 m y Valle Nevado, en su punto más bajo, llega a 2.860 metros, y hay una tendencia decreciente en nieve en el mediano plazo; no debería ser prioritario un proyecto de ampliación y cambio de trazado de la ruta". Aunque señala que "sigue siendo un bien de uso público, por lo que corresponde mantener en buen estado y transitable la ruta".
Otro punto que plantea Rohwedder es que los centros de esquí se reinventen y las mejoras a la ruta sean una futura inversión: "Como es montaña y está cerca de Santiago, puede ser una oportunidad para trabajar en varias direcciones, desde transformarse en un ecobarrio, como lugar de conexión con la naturaleza o para los deportes y turismo de montaña."
Finalmente, si con estos cambios o reconversión se justificara mejor la ruta, hay que colocar especial cuidado en su diseño y trazado por los efectos, sobre todo las precipitaciones de nieve que ahora son agua con su escurrimiento". Jonathan Barton, investigador asociado del Centro de Desarrollo Urbano Sustentable (Cedeus), complementa que "hay que hacer una proyección de escenarios para este destino, porque supongamos que realmente hacia 2050 va a tener que cambiar su rubro y fijarse en otras actividades complementarias al esquí". Y si eso ocurre, dice, habría que ver la inversión del Estado para ese lugar en comparación con otros proyectos.
El alcalde de Lo Barnechea, Cristóbal Lira, asegura que la temporada invernal se ha visto notablemente modificada por las condiciones climáticas, pero remarca que "el desafío del país y de nuestra comuna es poder adaptarnos al cambio climático, ser creativos y aprovechar todas las oportunidades que nos brinda la montaña, que no solamente se realizan en la temporada de nieve". Afirma que esto es una oportunidad para los centros de reinventarse "para entregar a la comunidad todo tipo de servicios y equipamientos todo el año, relacionados con el deporte al aire libre, como trekking, bicicletas, montañismo y esparcimiento, además de turismo y actividades recreativas que pongan en valor todos los beneficios multisistémicos que nos entrega la montaña". Cada año, debido a las escasas lluvias y las altas temperaturas, la temporada de nieve es más corta: El cambio climático se suma así a los factores que complican la construcción de la ruta a Farellones.
Fuente: El Mercurio