Aún así, esto no significa que se vaya a comenzar a trabajar ya. Se estima que se tardará otra década más en comenzar a colocar remontes de conexión, puesto que ahora queda por delante una ardua labor de estudios de impacto ambiental, alegaciones ecologistas, de propietarios de tierras, además de los permisos pertinentes del Servicio Forestal de los Estados Unidos, propietario de las mayoría de montañas donde se asientan las pistas actuales de esquí, y de las laderas donde se tendrán que colocar los remontes.
De llevarse a cabo el proyecto en su totalidad, One Wasatch contaría con 100 remontes, 750 pistas de esquí, y 7.200 hectáreas de área esquiable (Grandvalira o Baqueira tienen 2.000 ha.), es decir, el triple de lo que tiene actualmente Vail Mountain Resort (Colorado) o el doble de Whistler-Blackcomb (B.C., Canadá). Y todo por un coste estimado de 30 millones de dólares. Hay estaciones en Europa que se gastan mas en un solo verano.
Para uno de los responsables del proyecto, One Wasatch quiere asemejar a una experiencia parecida a la de Europa, donde las estaciones se van conectando a sus vecinas. En Norteamérica pese a haber complejos invernales literalmente pegados, en muy pocas ocasiones comparten forfait. Ni siquiera está la posibilidad de comprar un pase conjunto. De esta manera se podría atraer a esquiadores que están yendo a California o Colorado,