Conocer Baqueira Beret en tres días

Escribir sobre Baqueira-Beret y afirmar que se puede conocer en tres días no es un reto fácil. Pero es viable. Sus datos técnicos de presentación son para pensárselo dos veces: 165 kilómetros de pistas balizadas y una área esquiable de 2.273 Ha. y 37 remontes de todo tipo. Y dos vertientes: una parte mira al Atlántico y la otra lo hace hacia el Mediterráneo.

Y todo ello repartido entre 4 grandes áreas (Baqueira, Beret, Bonaigua y Baciver), entre las cotas 1.500 (pies de pista de Baqueira) y los 2.610 del telesquí Cap de Baciver. Además, conviene hacer mención a algunos de los restaurantes emblemáticos de la estación. Porque no se trata de sumar kilómetros para hacer el cumplido, la propuesta es disfrutar de Baqueira, con lo que implica deslizarse sobre esquís y disfrutar de su gastronomía.

Baqueira, cuatro grandes zonas

Para empezar, y teniendo claro que estamos tratando de hacer una guía esencial de Baqueira, cada uno puede añadir o quitar a su conveniencia, aquí planteamos una propuesta para conocer todo el dominio, segmentándolo en tres días, cada uno de los cuales para un solo día e intentando no repetir pistas. Y por último: no es una guia para esqiuadores de nivel técnico básico. Empezamos.

Primer día: Baqueira, para empaparse de su alma histórica

Nuestra propuesta es empezar por el sector central o histórico de Baqueira. Contamos que os alojáis en la Val d'Aran, no en las Valls d'Àneu.

Nuestra primera recomendación para la mañana será conocer el sector central y alto de Baqueira, arrancando el día con la telecabina 1500 de Baqueira.

Los telesillas Mirador, Cap de Baqueira y Jorge Jordana serán nuestros aliados para deslizarnos por las emblemáticas e históricas pistas rojas Pla de Baqueira, Mirador o Tamarro. Los tres, trazados de dificultad roja que nos irán muy bien para poner a prueba nuestra técnica y preparar el físico para visitar la cara norte. Una de mis pistas preferidas, Vista Ruda, la dejaremos para el final del día, ya os contaré el porqué.

La cara norte se hace de visita obligada para cualquier esquiador con suficiente técnica que quiera disfrutar de un descenso Non Stop por cualquiera de las pistas de la zona: a mi criterio, imprescindible el descenso de las pistas como Luis Arias o el Tubo Nere. Esta última quizás con bumps a partir de mediodía.

Una vez repasadas las pistas de la Cara Norte, nuestra recomendación es escaparse al sector de Baciver mediante el telesilla Jesús Serra. Este remonte nos permite familiarizarnos con el sector que visitaremos al día siguiente, a la vez que nos facilita el enlace, vía pista Azul Ta Baqueira, con los teleesquís Saumet.

I si las piernas no flaquean, subir con el teleesquí Baciver a la cota alta del dominio esquiable. La subida por este último arrastre nos permite disfrutar de unas panorámicas privilegiadas sobre la cara norte de Baqueira. Muy especialmente uno de sus itinerarios fuera pista más técnicos: Vinyeta. Las panorámicas desde aquí son de cine.

Para el descenso, el combinado Roca Blanca o Estanholets, parte alta, y Eth Coret, tramo bajo, nos permite disfrutar de diversos puntos panorámicos para tomar buenas fotografías. Finalmente, enlazaremos de nuevo con la base de los telesquís e iniciaremos el regreso hasta Baqueira 1500. Solo nos queda seguir por gravedad la única pista posible: Ta Baqueira 1 i Dera Cascada. Esta última también atraviesa un bosque de pino negro y se la conoce popularmente como Vuelta a casa. Pero nada de ir a casa, todavía quedan deberes por esquiar.

Un último esfuerzo para el primer día: tomar de nuevo la telecabina y el telesilla Pla de Baqueira. Nuestro último descenso del día lo haremos por la pista Vista Ruda, a esa hora de la tarde bien soleada, y enlazaremos con la pista Bosque o Baqueira para volver a la base 1500.

Nos habremos ganado una buena cena de après-ski. Y a dormir pronto, porque todavía nos quedan dos días igualmente apretados de horario para seguir conociendo Baqueira.

Segundo día: Beret

Nuestro segundo día empieza en Baqueira 1500 e igual que el día anterior nos servimos de la telecabina para subir hasta la cota 1800. Nos dirigimos de nuevo al telesilla Mirador para subir hasta la cota alta del sector, el Cap de Baqueira, a 2500, y desde aquí, y a través de la azul Cara Nord, nos dirigimos hasta la base del telesilla Jesús Serra.

De nuevo nos dirigimos a los telesquís Saumet. Nuestro objetivo serán las pistas que el día anterior dejamos a conciencia para el segundo día: se trata de Sanglier, Craba o Saumet. Hay que estar alerta de no pasarse el enlace de la pista azul que nos permite evitar llegar a la base del telesquí Saumet para, con este trazado, dirigirnos a la base del telesilla Dera Reina, eje central de Beret. Como curiosidad, o a mi me lo parece, Beret forma parte de la cuenca mediterránea (cuenca del río Noguera Pallaresa), a pesar de situarse en la Val d’Aran. 

Este telesilla nos permite acceder a las pistas Dera Reina, muy recomendable para disfrutar del carving: pendiente continua y ancha, aunque bastante frecuentada en según qué horarios.

Sin entretenernos mucho, nuestra recomendación es retomar de nuevo el remonte Dera Reina y, mediante la pista Els Pins o el enlace en diagonal, dirigirnos hasta la base del telesilla Dossau, renovado el año pasado.

Dossau es un sector abierto en 1985 que, a menudo, da la sensación de que bastantes esquiadores se deslizan más para devorar kilómetros que para disfrutar de sus pistas. Y es una lástima. Sí o sí, en este sector, es imprescindible visitar dos pistas: Ticolet y cualquiera de las tres pistas Ègua (1, 2 o 3). Y para buenas fotos: la pista Montgarri.

Y una vez nos hemos empapado de Dossau, ya podemos dirigirnos hacia la base de Blanhiblar, un sector abierto en el año 2000. Será la última zona del día que nos queda para conocer en Beret. Aunque en mi caso lo dejo para cerrar el día, hay quien con buen criterio os dirá que es mejor visitar antes Blanhiblar que Dossau, por cuestiones de insolación. Estoy bastante de acuerdo, pero por contra el orden de enlaces puede resultar algo más lento.

Una vez en Blanhiblar, empieza una cuenta atrás de relajación: hechos los deberes del día, podemos disfrutar de este sector que, caso algo similar a Dossau, con frecuencia los esquiadores parecen más estar de paso por la zona que no para disfrutarla. Imprescindible tomar el arrastre del Costarjàs. Disfrutad, en función del paso de las horas, de vuestras últimas bajadas de la jornada.

Si sobra alguna hora para continuar calzados con los esquís, volver a la base de Beret para visitar la azul Clot Der Os, con su reluciente telesilla inaugurado hace dos temporadas. Y a practicar un poquito de carving. Si aguantan las piernas, claro…

El regreso será a través, de nuevo, del siempre solicitadísimo telesilla Dera Reina para volver hasta Baqueira por las pistas Ta Baqueira o Vista Beret.

Una jornada exigente que tendrá bien merecida una reparadora buena ducha y una cena après-ski.

Tercer día: la Bonaigua

Atención al último día de esquí de nuestra visita de tres días a Baqueira. Años atrás, por estadística, se decía que el tercer día era el de las lesiones. Así pues, para nuestra tercera jornada dejamos el sector de Bonaigua, para muchos “la puerta de atrás” de Baqueira a la vez que el sector menos concurrido.

Empezando de nuevo por la telecabina de Baqueira y enlazando con el telesilla Mirador o Pla de Baqueira nos dirigimos a buscar cualquiera de estas pistas que nos llevan a los Argulls: Manaud, negra y con un muro de entrada que impresiona, o más suaves, las rojas Solei o Ta Argulls. A esa hora de la mañana quizá lo prudente sea evitar la Manaud, ya que es cara sur y puede resultar difícil en su muro de salida según qué días de la temporada.

El valle dels Argulls, abierto en 1988, tiene fama de ser el que más nieve recibe de entre todos los sectores del dominio. Si es posible, tomaremos el telesilla Teso dera Mina, que ofrece mejores vistas y alguna alternativa más que el telesilla Argulls. Cualquiera de las pistas de la zona tiene alicientes suficientes como para no recomendar solo una. A vuestro criterio.

Seguidamente, nos desplazamos a los teleskis del Tuc de la Llança, que algunos recordarán este nombre por ser notícia el 6 de enero de 2021 y los -34,1 °C que se registraron en la estación meteorológica.

Desde el Tuc de la Llança nos dirigimos a la pista Muntanyó, caprichosa en buena parte de su trazado por la forma de tubo. Más divertida imposible. Mediante esta pista nos dirigimos hasta la base de Bonaigua. Tomar la telesilla Bonaigua para descender por la fotogénica pista Cresta de Bonaigua y volver de nuevo a la base del port de la Bonaigua.

Nos dirigimos al telesilla biplaza Cap del Port, y entramos de lleno en la comarca del Pallars Sobirà, cuenca mediterránea. Con toda seguridad, el telesilla de La Peülla inaugurado en 1994 es el menos concurrido del dominio de Baqueira Beret, aunque año tras año gana popularidad como entrada alternativa.

En esta zona es imprescindible deslizarse por dos pistas: primero La Peülla y seguidamente la Pleta del Duc. Ambas muy divertidas, y la segunda con el añadido de fotogénica. Visitadas estas dos pistas podemos iniciar el retorno hacia Argulls por el telesilla Cap del Port y Bonaigua.

Para terminar los deberes, nos queda un reto importante para acabar de disfrutar de los tres días en Baqueira. Si nos sobra tiempo, subimos por el telesilla Manaud y recuperamos la posibilidad de descender por esta impresionante pista negra del mismo nombre, la "Manó". A esa hora de la tarde la nieve no estará tan dura. Eso sí, controlando siempre los horarios que nos garanticen la vuelta a Baqueira mediante los telesillas Manaud o Solei.

De nuevo, en el sector Baqueira, queda a vuestro criterio que pista repetir para descender hasta la cota 1500.

Y ya para finalizar, un apunte muy breve sobre los restaurants.

Restaurantes para desayunar o comer

Dejando claro que toda lo oferta de Baqueira es excelente en lo gastronómico, mi propuesta se basa más en el criterio del ambiente y el lugar en el que se encuentra.

En Baqueira, el cota 2200. Gastronomía aparte, excelente como ya había dejado por escrito unas líneas más arriba, nos interesa por su ubicación en medio pista y por sus panorámicas de escándalo.

Mi preferida en Beret, la terraza de Blanhiblar. Por sus panorámicas, lo primero, y lo segundo por el ambiente, a mi criterio más esquiador que no la oferta del pla de Beret, o el siempre más mediático Möet.

Y en Bonaigua, el refugi San Miguel, un “templo de la tapa”. En barra o taburete para los que tenemos prisa, o en mesa para quienes quieren comer relajadamente, sin prisas.

Y hasta aquí mi propuesta de guía para conocer lo mejor de Baqueira en tres días. Por supuesto, cada uno puede quitar o añadir lo que crea conveniente y así personalizar la estancia y el resultado todavía será mejor.

Lo importante, al final, es deslizarse por los 4 sectores del dominio y disfrutar de su nieve, su paisaje y en algún momento de la cuidada gastronomía que cada año va a más en Baqueira, como pasa en toda la Val d'Aran y las Valls d'Àneu. !Disfrutad hasta el último minuto y hasta la última bajada!