Buzz Aldrin tuvo que viajar 384.000 kilómetros hacia lugares nunca explorados para entrar en los libros de historia: el 21 de Julio de 1969 se convertió en el segundo hombre que dejaba su huella en el polvo lunar, tan solo unos minutos después que lo hiciera el también norteamericano Neil Armstrong.
Para llegar tan alto tuvo que usar el módulo lunar Apolo 11. El pasado invierno volvió a volar, aunque no tan alto, y cómodamente sentado en un helicóptero de Air Zermatt, quien lo dejó sobre los 2.600 metros de las montañas del Valais que corona el Breithorn (4.164 metros). Vestido totalmente de blanco, comenzó a caminar por una de las mejores nieves del mundo. Sus 85 años y la altura provocó que lo hiciese con cierta dificultad. Pero el viejo ex-astronauta es todo un luchador, tal como afirma e alemán Thomas Dirnhofer, Director del anuncio que Turismo de Suiza estaba preparando para esta temporada 2015-2016, y que ya podemos ver desde hace unos días.
Thomas Dirnhofer es un Director de origen austríaco, gran aficionado a la montaña y escalada, quien se ha especializado en anuncios publicitarios, pero también ha hecho sus 'pinitos' en el cine de montaña, como su trabajo que le hizo conocido, “Cerro Torre: A Snowball’s Chance in Hell“, donde pudo experimentar con diferentes técnicas de enfoque de las entrevistas, así como a probar con distintos estilos de cine documental deportivo. Afirma haber estado encantado de tener que trabajar con toda una leyenda como Buzz Aldrin, y ser la persona que ha hecho imprimir la segunda huella importante de este hombre, en esta ocasión sobre la nieve suiza. El anuncio fue encargado por la Oficina de Turismo de Suiza, dentro de la campaña #ENAMORADOSDESUIZA
Dimhofer recuerda que el hecho de que hayan podido rodar con Aldrin es un pequeño milagro. Lukas Viglietti, piloto de Swiss International Air Lines y presidente de Swiss Apollo es amigo del ex-astronauta, y una llamada de móvil explicando el proyecto hizo que el norteamericano se apuntara rápidamente. "Todo sucedió muy rápido. A principios de enero le llamó y en unas semanas ya estábamos rodando."
Buzz Aldrin por su parte no se mostraba menos entusiasmado,
«La primera vez que aterricé aquí, me dije a mí mismo: esto es otro mundo, ¡probablemente es el paisaje más extraordinario que he visto jamás! Y créame, que he estado en la Luna.»
El viejo ex-astronauta reconoce que no es un gran esquiador, aunque conoce bien Suiza de viajes anteriores. Que sigue creyendo que no hay nada tan increíble como un cráter lunar, pero que una buena fondue de queso suizo sigue siendo su placer mas esperado.Respecto a los viajes que se preparan para Marte, afirma que «Ya tengo claro que no voy a poner los pies en el planeta rojo», aclara entre risas. Pero si se le pregunta a Buzz qué busca la gente en Marte, aparece una mirada chispeante y da una respuesta clara: «Buscamos vida.»
Puedes ver el anuncio y lo que sucedió detrás de las cámaras en este enlace.
