Parece irónico que Portes du Soleil naciera como reflejo de los vastos dominios esquiables americanos. En los años '50 las estaciones de Europa eran pequeñas y la mayoría situada a las afueras de pequeños pueblos de los Alpes. En Estados Unidos en cambio se buscaron localizaciones donde instalar remontes y construir pistas, tanto daba si había algún pueblo cerca, ya se encargaría el promotor luego de desarrollar todo un pie de pistas. Así nació por ejemplo Squaw Valley, creado de la nada por el abogado neoyorquino Alex Cushing, quien montó un telecuerda y un edificio para albergar personal y turistas en mitad de una gran montaña deshabitada de California, y de esta manera logró nada menos que unos Juegos Olímpicos, los de Squaw Valley en 1960.
Y en aquellos Juegos participó Jean Vuarnet, quien además de inventar la forma del 'huevo' o schuss para tirarse pista abajo, se fijó que allí las estaciones eran mas grandes que las europeas y eso el esquiador lo valoraba mucho. Es irónico porque así se quedaron y no crecieron mas. Hoy la estación mas grande de aquella parte del globo, apenas es mas grande que Grandvalira. Pero sirvió la situación para que Vuarnet se pusiera manos a la obra para crear un vasto dominio esquiable en nuestro continente.
Vuarnet quería crear el area esquiable mas grande del planeta, y que así lo fuera durante muchas décadas. Así que decidió invitar a varias estaciones francesas a que se uniesen... y a otras suizas. Las primeras reacciones fueron de tachar el proyecto de auténtica locura, pero resulta que descubrió que ya existía un enlace transfronterizo. En 1956 un hombre llegado del Pirineo llamado Pierre Béteille instaló el primer remonte que pasaba entre ambos países.al prolongar el telesquí 'du Coq' por el valle de Corbeau, permitiendo la conexión de la suiza Super-Châtel a la francesa Morgins.
Convencidos todos, en 1964 se presenta en el Salón Anual de Lausanne una enorme maqueta de 3x3 metros, mostrando todo el proyecto. Se habían conectado las ocho estaciones francesas de Morzine, Avoriaz, Les Gets, Saint-Jean-d'Aulps, Montriond, La Chapelle-d'Abondance, Châtel y Abondance y las 4 suizas de Champéry, Morgins, Torgon y Les Crosets-Champoussin. En total 285 pistas y el dominio esquiable más grande del mundo bajo un mismo forfait, y muchas de ellas conectadas por remonte y pista.
Originalmente a aquel proyecto se llamó "Haute Route des Familles" inspirado en la recorrido histórico marcado por primera vez en 1861 que unía Chamonix y Zermatt por senderos). Pero Jean Vuarnet cree que este nombre no es demasiado comercial, así que en 1965 decide cambiarlo por el de Portes du Soleil, inspirado en una zona de la estación suiza de Les Crosets a caballo entre el lado francés y el suizo, en el corazón del proyecto.
De esta manera, 1965 marca el inicio del proyecto, y así se ha celebrado estos días en Portes du Soleil con varios actos festivos, exposiciones y eventos que se irán alargando a lo largo de esta temporada.
Pero para lograr culminar este proyecto faltaba algo muy importante. Había que crear la estación de Avoriaz. Porque uno de los ejes de la iniciativa era conectar esta estación con la de Champery. Así que Vuarnet creó de la nada este complejo invernal en 1966 y tan solo dos años más tarde se coloca el Chavanette, un biplaza de pinza fija que le conectaba a Champery, y hoy sustituido por telesilla mas moderno. Su puesta en marcha también se hizo posible gracias a la creación de la legendaria 'Le Mure'. La pista, ahora conocido internacionalmente por su nivel de exigencia y largusísmo tramos con mas del 50%, es apta solo para esquiadores expertos, y muy en forma, ya que además es toda de bumps. Al año siguiente se creó el primer forfait transfronterizo que permitía esquiar entre Avoriaz-Champéry-Morgins.
Tuvieron que pasar varios años para que se lograra crear un forfait único. Finalmente en 1976 se logró lanzar el pase de Portes du Soleil. Lograr esto no fue fácil. Vuarnet puso de acuerdo a varias entidades y profesiones bajo una misma asociación: Empresas que gestionaban los remontes, Oficina de Turismo, los Clubes de esquí, los profesores y hasta las autoridades políticas. No quisiera imaginar los quebraderos de cabeza que tuvo que sufrir este hombre para lograr tamaña hazaña... pero lo consiguió!
Al frente de esa asociación puso a Jean-Pierre Béteille, aquel hombre del Pirineo que creó el primer remonte transfronterizo, quien estuvo en el cargo desde 1978 a 1988. Béteille creía enormemente en el proyecto, como lo hiciera Vuarnet, y estuvo encantado de liderar la creación de un paquete único. Años mas tarde diría que "fue muy buena idea el crecer gracias a enviar esquiadores de un lugar a otro". A partir de ese momento los remontes que permitían transportar esquiadores de una estación a otra crecieron enormemente. El objetivo era que los visitantes pudiesen trasladarse de una estación a otra rápidamente. Este año de hecho se ha inaugurado uno de los enlaces más demandados, el de Linga con Super-Châtel.
Georges Coquillard es el actual Presidente de Portes du Soleil. Para este hombre la creación de este proyecto permitió pasar de un 45% de turistas que llegaban a aquellos valles para esquiar, a un 75-80%. En el lado francés incluso se ha pasado de un esquiador 100% nacional a tener un 60% extranjero. En el lado suizo la cifra de extranjeros siempre fue, y es, muy alta.
Hoy en día, la asociación de Portes du Soleil genera un negocio bruto de 1.000 millones de euros, e invierte anualmente 30 millones de euros en modernizar su red de remontes. El siguiente paso en su proyecto es la vinculación de Avoriaz-Les Gets en 30 minutos a través de un "Super Jumbo" que saldrá desde la oficina de turismo de Morzine, conectando con las 3S de Prodains. Se espera que esté finalizado para 2018.
La Portes du Soleil es ahora una de las áreas más grandes del mundo, con 12 estaciones interconectadas (4 en el lado suizo, 8 en el lado francés), 650 kilómetros de pistas, 196 remontes, 11 snowparks y 90 restaurantes. Cada una de sus estaciones se gesitonan de manera independiente, y cada una trata de atraer el máximo de turistas. Por eso unas han apostado por el turismo en masa con mejores precios y grandes edificios a cotas altas, y otras, por lo general las suizas, han tratado de preservar el encanto natural de los pueblos, sin crear un gran número de camas que 'estropee' la particularidad del lugar. Fruto de esta política encontraremos 24.000 camas en el lado suizo, por las mas de 100.000 del lado francés.
A partir de aquí queda elegir donde plantar tu campamento. Si buscas precio, el lado francés. Si buscas pueblos auténticos donde al acabar tu jornada puedas pasearte entre casas de madera, todas ellas muy juntas para resguardarse del frío, y disfrutar de un auténtico apré-ski montañero, tu lugar es Suiza. Champery es un buen lugar, por su situación en el mapa, por sus buenas conexiones en tren hasta el mismo centro de pueblo, con parada incluso enfrente de su teleférico.