Mi día comenzó en el pueblo de Panticosa desde donde salí remontando Estrimal para hacer la ruta a los ibones de Sabocos y Asnos. Mucho ambiente en el párquin y mucha gente haciendo uso del telecabina.
Desde la parte baja de Fobas, pude ver parte del bikepark, otro atractivo de la estación en verano. Y el ambientazo continuaba en la zona de llegada del telecabina donde, para muchos, es donde comienza el paseo hacia los ibones. Desde la conexión con la zona de Sabocos hasta llegar al ibón lo que más se veía era ganado, incluso los caballos estaban haciendo cola para subir a Corona de Aragón, pobrecillos, no saben lo que falta para que empiece la temporada!
Luego de Sabocos, tocó subir a Asnos, donde sí que había más gente. Finalmente, conexión al telecabina y Selva Verde+Estrimal hasta el pueblo, donde almorcé
Habiendo dado la mañana por bien aprovechada, continué camino hasta el Balenario. El hotel es más que conocido por los foreros que participaron en la KDD de abril pero ahora, con un toque veraniego Alojarse en el hotel para usarlo como base para hacer rutas por la zona es ideal y, por lo que he visto, es lo que eligen para hacer muchísimas parejas.
Además del hotel, las Termas de Tiberio permiten relajar los músculos luego de un día de montaña
No está permitido entrar con dispositivos electrónicos así que he cogido unas fotos de su propia web. Estar en esa piscina al aire libre un día de invierno mientras nieva es algo que tengo que probar!
Pero, claro está, no hay que olvidarse del entorno en el que nos encontramos, ni de la sección gastronómica, que para eso hay varios restaurantes y bares!
Como decía al principio, al ser etapa de la Ruta Transpirenaica, hay mucho, pero que mucho senderista. Y, al caer la noche, hice algún intento por fotografiar la Vía Láctea. Necesito perfeccionar la técnica para las fotos nocturnas, no le acabo de pillar el punto
La ruta para el siguiente día era un tanto ambiciosa. Si no hubiese ido solo, me habría gustado subir los Picos del Infierno pero por lo que leí tiene dos o tres pasos complicadillos así que decidí que los rodearía en vez de subirlos. Luego de un desayuno como dios manda, comencé a subir por la GR-11 dirección Respomuso, bordeando el río Caldarés. Luego de la Cuesta del Fraile, aparecieron el Refugio de Bachimaña y el embalse bajo.
La senda continúa hacia el embalse de Bachimaña Alto, pasando por el desvío hacia el puerto de Marcadeau y el precioso ibón Azul Inferior, donde paré a descansar unos minutos al igual que la gran cantidad de gente que llegaba hasta esa parte de la ruta. Además de lo típico de ver familias y grupos de amigos, me parece que la gran mayoría con los que me crucé iban en pareja, de todas las edades. La verdad es que es un planazo para hacer en pareja si a ambos les gusta la montaña.
Un poco más arriba, llegué al ibón Azul Superior, aunque este no me pareció tan azul como el otro. Con vistas al agonizante Glaciar del Infierno, aproveché un nevero con forma de cueva para rellenar la bolsa de agua bien fresquita y continuar ruta hasta el Collado del Infierno y el ibón de Tebarray.
Una vez en el collado (2.721m) , y mientras la GR-11 continuaba a mi derecha, rodeé el ibón para comenzar a bajar por el Barranco de Tebarray. Las vistas eran alucinantes, aunque el panorama se me iba a oscurecer un poco a partir de aquí
No hay de hecho muchas fotos porque no estaba de humor para ir mirando el paisaje. Resulta que el GPS y yo tuvimos un pequeño desacuerdo y no pude encontrar la senda correcta. Sabía que tenía que rodear el Garmo Blanco y los Picos hasta encontrar el Salto de Pondiellos , pero la orografía tan abrupta me hizo dar más vueltas de las que hubiese querido, incluyendo algún destrepe que hubiera preferido no tener que hacer.
Luego de haber bajado casi hasta los 2.500m superé el Salto y llegué hasta los 2.700 del ibón Inferior. Un pequeño descanso, ahora sí, tomándome un tiempo para contemplar esas marmoleras y cuando parecía que los buitres me estaban mirando con demasiado cariño decidí continuar un poco más hasta el ibón Superior. Allí, ya con el punto más alto de la ruta a tiro de piedra, el Collado de Pondiellos (2.818m) paré a picar algo. Eran ya las 16:45 así que no podía entretenerme mucho. Una vez en el collado, y con el Balenario a la vista, comencé la bajada. Progresar entre tanta piedra suelta es complicado. Se mezcla todo, resbalones en las piedrecillas sueltas, algún que otro mal paso producto del cansancio acumulado y las ganas de llegar, pero la sensación de no avanzar. La Mallata Alta fue el primer hito pero el Balenario no parecía estar cerca aún
Finalmente, las zetas por el bosque que acabaron en el cruce del río Caldarés y estaba de vuelta. Un copazo por el esfuerzo!
Para hoy lunes tenía planificada subir a los ibones de Brazato, pero aún estaba un poco acojonado por lo de ayer, así que he subido al mirador, ver las cascadas y he dado el finde por bueno.
Para la próxima, más y mejor! Quiero agradecer a Nevasport y a la gente del Balneario de Panticosa por darme la oportunidad de conocer esta maravillosa zona en verano, acabo de llegar a mi casa y ya me gustaría estar nuevamente allí