- Shhhhh, silencio. – Respira. Disfruta del frío y de la nieve polvo recién caída. No pienses en las nubes. Salga o no salga el sol, la previsión para hoy es buena, así que, puede que con un poco de suerte igual tengamos fotos con fondo azul. DISFRUTAR, ese es el verbo que hoy debemos conjugar. Déjate llevar por los remontes, disfruta de las pistas y de varios itinerarios para los amantes del freeride que están dando la vuelta al mundo. Grandvalira es el reino de las pistas rojas, el dominio ideal para los esquiadores de nivel medio que buscan emoción y nuevas sensaciones, subiendo de nivel progresivamente.
Desde hace casi 30 años, el dominio esquiable que configura actualmente la marca Grandvalira, seduce a esquiadores de todo el mundo. A nivel personal, año tras año he tenido la fortuna de poder seguir muy de cerca la evolución de Grandvalira, disfrutando de las novedades que incorporaban a su, ya de por si, extenso catálogo de maravillas, y este año, observo con ilusión que Grandvalira crece todavía más, ampliando su marca, sinónimo de calidad y exclusividad, hasta las pistas de Ordino-Arcalís, uno de los destinos freeride más espectaculares de toda Europa, que sigue arrasando en el Freeride World Tour.
Así pues, Grandvalira no solo seguirá con su actividad de manera indefinida, sino que ahora sumamos la estación de Ordino Arcalís a su oferta esquiable. Dicha combinación permitirá ofrecer a los esquiadores una oferta de esquí enorme, con un total de 240 km de pistas, remontes modernos y rápidos, una oferta gastronómica de alto voltaje y un sinfín de itinerarios ideales para quienes busquen emociones fuertes. Tal y como comentamos anteriormente, Grandvalira es el dominio ideal para ir ganando nivel, disfrutando de una nieve muy cuidada y rodeados por un entorno natural de película, brillando con luz propia varios sectores de la estación con recorridos espectaculares.
En el sector del Tarter, le tengo un cariño muy especial a la roja Isard, que parte desde la salida del teleskí Encampadana y llega hasta la Riba Escorxada. Suele ser la primera roja que bajo al llegar, ideal para calentar motores. La mayoría de pistas que bajan hasta la Riba Escorxada son perfectas para empezar el día, pues son pistas anchas, con buen desnivel pero sin grandes complicaciones. Y ya que estamos, os recomiendo degustar al mediodía un buen arroz en el Pi de Migdia (el Tarter), todo un descubrimiento de hace un par de temporadas.
Desde el Tosal de la Llosada (2.560m), parten varios recorridos interesantes, siendo uno de los que más me atraen el que parte de la roja Miquel y conecta con la roja Corb, una pista realmente interesante. Si no hay mucha gente, la roja Llop permite ganar velocidad disfrutando de un trazado perfecto por debajo del telesilla Llosada. Una de las grandes ventajas que nos ofrece el Tosal de la Llosada es la variedad de pistas asequibles (rojas y azules) que bajan desde su cumbre, disfrutando de pistas largas muy anchas. La conexión con el sector de Grau Roig y el Pla de les Pedres nos ofrece varios recorridos por pistas rojas y negras muy a tener en cuenta, destacando las rojas Pla de les Pedres y la Riu Solanelles. La primera es larga, con cambios de rasante ideales para practicar giros rápidos. Algo más cortas pero igual de divertidas son las rojas Enradort y Perdiu Blanca, destacando la roja Serrat Pinós, una gozada con buena nieve.
El camí de Pessons es la clásica roja-camino que me recuerda a la pista Gandegg de Zermatt, que conduce al Gandeghütte. Aquí tenemos el refugio-restaurante de Pessons, que es una maravilla. ¡Que recuerdos me traen el teleskí Montmalús y su pista roja!, desde donde podemos adentrarnos en el bosquecillo adyacente. Es una pista que siempre bajamos antes de subir hacia Pas de la Casa. Todas las pistas rojas que bajan desde el Coll Blanc (2.528m) son fantásticas para ir ganando confianza y seguridad. La Pista Llarga es toda una institución en Grau-Roig, así como la pista roja Grandalles, a primera hora de la mañana suele estar perfecta para darle caña a tus esquí, con poca gente y recién pisada. Algo parecido sucede con la negra Antenes, una pista que repetimos una y otra vez gracias al telesilla Antenes, que te deja justo en la salida. Una vez llegamos al sector de Pas de la Casa, suelo bajar por las dos directas (rojas), aunque las negras Corbater (que conecta con la roja Gavatxa) son muy prácticas y exigentes.
Antes de cambiar de dominio esquiable, (y antes de seguir leyendo), recomiendo visionar el filme Extraordinary, de unos 10min…y ya me contaréis qué os transmite. Llegados a este punto no podemos pasar por alto a Ordino-Arcalís, el nuevo dominio que se ha sumado a Grandvalira. Encontramos recorridos interesantes para quienes buscan disfrutar de la nieve al 100% bajo el telesilla de Basera y junto al teleskí Feixans.
Y para rematar, no podemos pasar alto que esta temporada Grandvalira ha mejorado muchas pistas y ha cambiado las cabinas del telecabina de Soldeu. Grandvalira volverá a convertirse en el epicentro del esquí de competición a nivel mundial, con las Finales de la Copa del Mundo de esquí alpino que se disputarán en las pistas de Soldeu-El Tarter del 11 al 17 de marzo de 2019, recibiendo a los 25 mejores esquiadores y esquiadoras del mundo de cada una de las disciplinas. El trazado de la emblemática pista Àguila es realmente espectacular, y no hay nada mejor que poder descender por una pista tan mítica con nuestros esquís durante toda la temporada.
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Vivir, sentir, dejarse llevar…Cerca de una arista o de una cumbre, siempre hay mil excusas para bajarse y una sola razón para subir.