El gran reto de la Border to Border: el “Dakar blanco”
“Border to Border” es “Frontera a Frontera”… Desde la de Finlandia con Rusia hasta la de Finlandia con Suecia. Es la trigésimo cuarta edición de esta prueba que no es cronometrada: es un ser o no ser. O terminas las siete etapas y 440 kilómetros sin subirte al autobús o no serás finisher. En este “Dakar blanco” tienes que completar etapas que van desde los 46 hasta los 84 kilómetros de fondo. El día de los 84 es… ¡un doble maratón en una sola jornada! ¡El doble de una Marxa Beret, y la Marxa es sólo un día, no una semana completa de etapas!
Sin duda, volveré a ser el peor de los 250 esquiadores que procedentes de 15 países (14 inscritos españoles) que se enfrentará a este gran reto. Y también seré probablemente el único que lo hará con esquís de escamas, mucho más lentos y trabajosos que los de ceras, pero más fáciles.
En el 2015 logré acabar, aunque llegando entre los últimos todos los días y superando un día tremendo: la jornada de los 84 kilómetros me perdí en un Parque Natural y la convertí en una etapa de 99… Al llegar al hall del hotel, los compañeros me recibieron con aplausos porque muchos cuchicheaban sobre ese torpe esquiador español que con sus esquís de escamas se había metido en la boca del lobo… Realmente nadie apostaba por mí y no me gané el respeto de nadie como buen esquiador, pero sí como sufridor. Aquel día fue uno de los más largos de mi vida y tuve que ir cantando en voz alta y hasta interrogándome a voces con preguntas fáciles, porque hubo algún momento en el que no tenía yo muy claro que me mantuviera lúcido. Mi manera de autochequearme para saber si estaba bien de cabeza pese al agotamiento, allí solo esquiando en el desierto blanco, era preguntarme en voz alta mi nombre, mi edad, dónde vivía, los nombres de mi familia… Llegué agotado, pero feliz. Y me emocionó mucho el recibimiento de los compañeros.
Este año partimos el próximo jueves 9 de marzo en cuatro grupos sucesivos (9-10-11-12) y la prueba termina para el primer grupo, al que yo pertenezco, el miércoles 15 (15-16-17-18). Por en medio toca cruzar docenas de lagos helados y bosques nevados con temperaturas que pueden acercarse hasta los -20, aunque lo normal y deseable es estar bajo cero con sólo un dígito. Por debajo de -10 el frío es demasiado intenso para estar 8 o 10 horas sin parar de esquiar, sin más ropa que la puesta y con una pequeña riñonera para unas barritas, el teléfono, agua y un cortavientos como todo equipaje. Y por encima, en las proximidades de cero grados, la temperatura es muy agradable pero la nieve se transforma y empiezan los problemas de deslizamiento y de elección de ceras.
Si queréis seguir conmigo esta aventura, intentaré ir contando el día a día en artículos aquí Nevasport, aunque también tendréis info, videos y fotos en la página de Facebook de Full Activity
¡¡Allá vamos!!