La joya de Carintia
Pero para llegar a Nassfeld, antes os quiero llevar desde Spittal/Drau, por un camino en el que también se encuentra otra de las grandes joyas y que hace las delicias de los más deportistas tanto en verano como en invierno.
Para llegar a Hermagor desde Spittal/Drau, hay dos caminos “directos”, uno vía Autopista, y otro atravesando las montañas que quedan por detrás de Goldeck, a través del Drautal.
Abandonamos Spittal/Drau por el Oeste por la carretera que une esta última con la capital de Osttirol, Lienz; y que para las bicicletas es una etapa más del Drauradweg, el camino que recorre el valle del Río Drau paralelo al mismo hasta la frontera con Italia.
Y para los más atrevidos, la etapa Spittal/Drau – Lienz tiene 71km, los cuales, en bicicleta, se tarda, al menos, unas 5 horas en recorrer, pero que sin duda, es una buena excursión para los verdaderos amantes de la naturaleza y el deporte, pues el recorrido deja estampas muy atractivas.
Pero no hay que recorrer todo el camino del Drau para llegar a Hermagor, pues en apenas unos km desde Spittal/Drau llega nuestro desvío hacia el pueblo de Techendorf, al que llegamos tras unos corto trayecto, y dónde se encuentra la gran joya de la región: el Weissensee (el lago blanco, pues en invierno así es como se queda)
En Verano:
Y en invierno:
El lago se hiela hasta tal punto, que prácticamente todos los años, se puede patinar libremente sobre él en una pista preparada.
Y si, aunque en las fotos no haya nadie, es bastante popular, lo que pasa, es que el acceso por transporte público es apenas inexistente, y las fotos están tomadas a finales de Abril, cuando el lago ya se encontraba cerrado para el patinaje.
El lago se encuentra a 930 msnm, (el más alto de Carintia para bañarse), tiene más de 11km de largo, por máx 900m de ancho, y es uno de los menos privados de Carintia, imposible de rodear toda su orilla por carretera. Y que, en la zona que ésta no existe, se rodea directamente por montañas de más de 1800m.
Y es aquí, dónde, en la orilla Sur del lago, se encuentra la miniestación de esquí con el mismo nombre:
Con apenas 6km de pistas entre los 930 msnm y los 1 324 msnm, con tan sólo 1 telesilla, y 4 pequeños telesquís, se promociona más dentro de la oferta conjunta del lago, que como una estación de esquí en sí misma. Como una joya de los deportes de invierno: el esquí de fondo, con 8 pistas, y cerca de 50km, 10 pistas de patinaje sobre hielo, que suman otros más de 15km, unos 5km para trineos, en teoría 7km con trineos para perros, y, por si fuera poco, 40km de senderos preparados de invierno.
Esta mini-estación, sólo tuve la oportunidad de conocerla en verano, y, sin duda, lo que más me llamó la atención fueron las increíbles vistas sobre el lago
Y en primer plano, con lo que en invierno, debe ser una muy buena pista de esquí
El Naggleralm en su parte alta, es un pequeño refugio de montaña, que en verano ofrece comidas en un entorno increíble, y además es punto de partida para, caminatas, por ejemplo hasta Golz (2 004 msnm, cerca de 2h, al fondo de la foto) y en 5-6h nos llevarían hasta Hermagor.
Pero el verdadero motivo de este viaje, y por el que os he llevado a través de las montañas, es para conocer, la que, desde mi punto de vista, es la joya de la Corona en las estaciones de Carintia, y que, para muchos locales, es un secreto muy bien guardado, que bien no merece extender mucho, pues su verdadero encanto radica en su relativa tranquilidad: Nassfeld – Hermagor,
Con 110km esquiables, (100% innivado) es la más grande de Carintia (junto con Bad Kleinkirchheim), pero al contrario que en esa, aquí todo esta junto, y no hace falta quitarse los esquís para cambiar de zona en ningún momento.
Sus pistas se extienden desde los 610msnm, hasta los 2 020msnm; toma el nombre del Nassfeldpass, el puerto que separa Austria de Italia de manera natural, con Pontebba en la parte Italiana, y Tröpolach en la Austríaca.
Es lo suficientemente grande, como para poder conocerla en un día, y esquiar un poquito de aquí, y otro poco de allá, pero difícilmente podrás abarcarla y disfrutarla en su totalidad, pues son muchas las pistas y muchos los secretos que esconde.
¿Alguna vez habéis visto por internet, habitualmente por navidad, alguna foto de un paisaje nevado, tan bonita, que pensáis, ¡Esto tiene que ser mentira! ¡¿Dónde existe esto!? Cabañas de madera con su tejado repleto de nieve suave y redondeada, como si fuera un manto de algodón, cuyos cristales brillan con el Sol; todo rodeado por unos árboles congelados, inundados con tal cantidad de nieve en las ramas, que parece que alguien lo ha moldeado aposta para la ocasión, y termináis pensando, ¡esto no existe!
Pues tengo una alegría para vosotros, sí existe, y esta en Nassfeld
A mí, me pasó algo parecido: un día en la universidad estudiando, decidí distraerme un rato con el facebook, dónde me encontré, sin quererlo, una foto como esta, de cómo era el aspecto que la última nevada había dejado en la estación:
Y esta vez, sí sabía dónde era; así que dejé todos los bártulos, y al siguiente día libre, ¡a esquiar!
En Nassfeld es imposible no encontrar gente, siempre la hay, y curiosamente, las colas, salvo en contados remontes, como las cabinas, nunca son excesivamente largas. El esquí se convierte en una delicia en esta estación, en la que, incluso un sábado, pasas más tiempo esquiando que esperando en los remontes.
Hay tres puntos principales de acceso a la estación: Tröpolach, el pueblo base, desde dónde se toma la góndola Millenium Express, que durante cerca de 25min te adentra más, si cabe, en las montañas, atravesando paisajes que no se pueden esquiar, hasta dejarte en pleno corazón de la estación.
Otro punto de acceso, es Sonnleitn (1 380msnm), un pequeño pueblo al borde de la zona esquiable, con su zona de debutantes, y un telesilla que te conecta con el corazón de la estación, dónde también te deja la góndola
Aunque no muy fácil de encontrar, tienen una de las pistas más bonitas que disfruté en la estación
Y el remonte con las mejores vistas que he visto en mi vida:
Y el tercer acceso por carretera, es posible desde el Nassfeldpass (el puerto de Nassfeld) en la frontera exacta entre Italia y Austria
Desde aquí se puede ascender en dos direcciones, hacia el Gartnerkofel (2 195 msnm)
O hacia Kofelplatz-Madritsche (el corazón de la estación, dónde llega el Millenium Express).
Pero permitidme primero, que os lleve hacia el Gartnerkofel (el pico a la izq de la foto)
Y aquí rodeado de árboles colapsados de nieve:
En esta ladera ninguna pista tiene desperdicio, y cada cual, es más apasionante y bonita que la anterior.
A mitad de camino, se encuentra el Snowpark, uno de los más grandes que he visto, y con unos saltos sólo aptos para verdaderos valientes, pues, aún lanzándote con miedo, literalmente, vuelas. Una descarga increíble de adrenalina.
Esta ladera, también tiene un encanto especial en verano, pues el Gartnerkofel es el hogar de una pequeña plantita llamada Wulfenia, que curiosamente, sólo crece aquí, y en el Himalaya.
Y que muchos austriacos aprovechan para una pequeña excursión durante el verano, para aprovechar la estación también en este tiempo:
Y ésta, la ladera contraria al Gartnerkofel:
Una zona, también, con un enorme encanto en verano:
Que, desde lo alto del Gartnerkofel, ofrece unas vistas increíbles del valle de Hermagor (Gailtal) así como la estación de esquí:
Superado el alto junto al Gartnerkofel, nos queda otra pequeña zona esquiable, mucho más tranquila de lo habitual, pero que aún guarda buenas pistas, y paisajes apasionantes. Ya casi en Italia, pues hay pistas y remontes, que, al parecer, se olvidan de la frontera y campan a sus anchas entre los dos países.
Tanto en invierno
Como en verano
Al otro del Nassfeldpass (en la ladera contraria al Gartnerkofel), es dónde deberemos bajar si hemos subido desde el pueblo base, o si, por el contrario, queremos llegar al corazón de la estación desde el puerto:
Montaña del fondo, en invierno y en verano
Este área, es la primera que conocí de la estación, y aunque no es excesivamente grande, son numerosísimas las pistas, y una cosa es pasar de largo para conocer la estación, y otra es pararse a conocer una por una, a quienes, los árboles que las rodean, otorgan personalidades diferentes, y con una calidad de nieve polvo excepcional entre los árboles.
Y en una de sus áreas, la pista serpentea entre pequeñas urbanizaciones y chalets, en los que, de nuevo, el que viva allí, es un verdadero afortunado:
Siguiendo de valle en valle, y cruzando el alto de llegada de la Góndola, bajamos, a la que, en invierno, es la verdadera joya de la estación, con estampas que enamoran, como ésta:
La nieve, no siempre es de la mejor calidad, para mi gusto, la pisan demasiado, hasta el punto de que la nieve que agarra se reduce a una capa de un escaso cm, y más de una ocasión el esquí resbalaba, que no deslizaba.
Por aquí, alguien decidió otorgarle un toque de diseño a la estación, y en el primer remonte con calefacción que conocí, también jugaron con los colores para convertirlo en algo más especial de lo habitual, pintando cada silla de un color
Y tomando el pequeño telesquí tras terminar la pista, podemos seguir conociendo la estación:
No sin antes, encontrarnos con otro detalle particular en la estación alta:
Para encontrarnos un amplísimo repertorio de pistas, servidas con tan sólo un telecabina, que te pueden entretener durante mucho tiempo, corriendo el riesgo de quedarte todo el tiempo en esta zona
En su cima, otra vez, lindando con Italia, a dónde puedes llegar con tan sólo 2 minutos de caminata desde el Troghöhe, (otro punto muy interesante de vistas panorámicas)
Al que llegamos desde la telecabina de turno, que nos deja unas vistas espectaculares
Y mirando hacia el lado contrario, un curioso paisaje de rocas, que nevado, deja una ladera algo diferente a lo que yo, estoy acostumbrado a ver fuera de pistas. Como si alguien hubiera tirado enormes pedruscos de nieve, que nunca se hubieran desecho.
Las pistas en Nassfeld, son anchas, largas, y rápidas, y aunque siempre se encuentra gente, nunca son un estorbo, y se puede disfrutar perfectamente. Pero cuanto más te alejas del corazón de la estación, más tranquilas y solitarias se vuelven.
Los fuera de pistas, visto dónde se puede y dónde no, debe ser una auténtica delicia por toda la gente que los atraviesa
Se puede seguir bajando y bajando, para llegar a la última telecabina de la estación, antes de decir adiós; con una pista deliciosa, casi paralela a la cabina, en cuya base encontré en alguna ocasión la primera nieve que me ha frenado mientras intentaba evitar remar.
En su parte alta es dónde se inicia la última pista de la estación, la más larga:
La número 80, (la más a la dcha del plano), con un desnivel de 1 212m y casi 8km non-stop cuesta abajo.
Para llegar de nuevo al pueblo base
Y acabar en la única pista de la que se puede disfrutar el esquí nocturno, gracias a la primera estación intermedia del Millenium Express, con cerca de 2km esquiables. Sólo disponible los fines de semana hasta Marzo.
Quitarnos los esquís, y tomar el tren de vuelta a casa
Para decir Adiós a Nassfeld, y Adiós a Carintia. Pues aquí se acaban nuestras pequeñas andanzas por esta exquisita región de Austria, que fue mi hogar durante 10 meses y que así os he contado.
Espero que os hayan gustado todos los reportajes que os he ofrecido, y alguno de vosotros se anime un buen día a visitar esta zona, y a disfrutar de todo lo que os he ido relatando.
Como últimos consejos, si os ha pica el gusanillo de viajar hasta allí, os recomiendo viajar en avión, desde España, desde/vía Madrid, a los aeropuertos de Munich (+3h de coche hasta Spittal/+3h50min de tren), Venecia (+3h de coche/4h de bus+tren), Trieste (+2h de coche/+2h20min desde Udine), o incluso Vienna (+3h40min en coche/+5h en tren).
También existen los aeropuertos de Klagenfurt, Ljubljana, Salzburg y Linz, pero las conexiones al menos desde Madrid, son infinitamente más complicadas y caras.
Si queréis ir a esquiar, alomejor os interesa: Kärnten TopSkiPass http://www.topskipass.at/
Skihit Osttirol (Osttirol + Mölltaler Gletscher + Ankogel)
Pero si preferís hacer excursiones en verano, os interesa (tarjeta tarifa plana de actividades para el verano)
Y si no os convence lo aquí relatado, y lo único que queréis es perderos por las montañas (una fuente inagotable de excursiones): http://es.bergfex.com/sommer/kaernten/
Transporte en tren: www.oebb.at; para buses: www.postbus.at
Pero sin duda, lo mejor, es alquilar un coche con ruedas de invierno, fuera de Carintia (para mí, son extrañamente más caros allí)
Para cualquier consejo puntual, siempre podéis contactarme a mi perfil.
Estaré encantado de ayudaros.
Para todo lo demás, Nevasport
Pero ¡Esperad! ¡No os vayáis! Sólo es un hasta luego, por que… Por si hay alguno, a quién le ha sabido a poco, aún queda un pequeño epílogo de 3 estaciones más de Osttirol, también incluidas en el pase de Carintia, y que aún no os he contado. ¿Queréis saber más?
Eso os lo contaré en nuestra última etapa
¡Hasta la última!