Día 7: Solitude
El sábado era nuestro último día de esquí en este viaje, estabamos ya algo agotados de ir de estación en estación sin parar. Estábamos indecisos entre conocer Solitud o Brighton, al final, los comentarios de un local en Snowbird nos hicieron decidirnos por
Solitude.
Llegando a la estación de Solitude, la última que conoceríamos este viaje
Solitude está a unos 30 minutos en coche desde Salt Lake City, es una estación familiar, de construcciones alpinas, muy tranquila, enfocada al esquí con niños, pero como en todas las estaciones de Utah, con zonas ideales para el freeride.
Aparcamos estratégicamente en la base de una de las pistas de la estación
Base de la estación amplia y accesible
Giros amplios mañaneros para ir cogiendo tono
Y para arriba a conocer las zonas altas
De nuevo, dos estaciones pegadas pero con forfait independiente, qué lástima!
Una cuerda separa los dominios de las dos estaciones
Pisteros tomando el sol en una de las cumbres de la estación
Casa de socorro en pistas
Una estación amplia, variada y tranquila, un gran acierto visitarla
Un estupendo espacio de juegos para descubrir caminos y rutas
Pueblo de imitación alpina, prefiero cuando mantienen su esencia minera
El grupo en el parking despidiéndose de las estaciones de Utah por esta temporada