Nada mas bajar de nuestro anterior reto, teníamos claro de que nuestro próximo objetivo era el Allalinhorn. Pero que hacer el día de descanso..¿¿?? Subir hasta el refugio del Hornli-Hutten a los pies del Cervino o ir a Saas Fee a inspeccionar el terreno insitu.
Pues nada, abandonamos nuestro Cervino...
Según llegamos a Saas Fee, esto fue con lo que nos encontramos.
Los típicos graneros con el Allalinhorn (4027 m) en la parte izquierda y el Alphubel (4206 m) a la derecha de la foto.
Saas Fee es un pueblo con buenas instalaciones cara al verano pero tal vez le falte el encanto de Zermatt. Existe una restricción para andar por vehículo por el pueblo con un gran aparcamiento a la entrada y como la oferta hostelera no era tan variada como en Zermatt (el pueblo estaba bastante mas muerto....), lo teníamos claro, a sobar al valle que para algo hemos traído la frego.
Para ascender al Allalinhorn teníamos varias opciones. Una es desde Langflue (2870 m), la otra desde el telecabina Felskinn (2991 m) y la tercera desde el Metro-Alpin (3500 m).
Ese día de “descanso” lo aprovechamos para subir hasta la zona de Langflue ya que la descartamos como posibilidad de ascenso debido a que el telesilla no estaba operativo.
Comenzar el ascenso y nos topamos con una “Blanquita” un tanto desmejorada, morando la no menos desmejorada casita de Heidi.... y es que el tiempo pasa para todos.
Seguimos ascendiendo hasta encontrarnos con una de las morrenas del glaciar Feegletscher capitaneado por las paredes del Taschhorm (4490 m).
A 2600 m comenzamos a pisar nieve, haciéndonos cuenta de otro curioso fenómeno, alguna tormenta o fenómeno similar había dejado un reguero de barro por encima de la nieve. Y era reciente ya que todavía apenas se había hundido en la propia nieve..... curioso...
El paisaje comienza a cambiar y comenzamos a vernos rodeado del glaciar Fleegletscher por ambos lados al subir por el evidente promontorio rocoso, pero cubierto de nieve, donde se ancla el teleférico que sube hasta la zona de Langflue.
Mirando hacia la derecha el glaciar daba miedo....
Y mirando hacia la izquierda las grietas y los bloques de hielo daban una sensación caótica total....
Pero una vez arriba en Langflue, el Allalinhorn se alza frente nuestros pies....
No es mala vía de ataque ya que se cruza la que en verano es la estación de ski del glaciar que se presupone algo mas segura en cuanto a grietas y libre de skiadores por estas fechas. Pero el no-funcionamiento del telesilla hace que el desnivel desde Saas Fee sea bastante grande y el cuerpo no lo tenemos como en la primera ascensión.
Este seria la otra alternativa de ascensión, el Felskinn, que si no recuerdo mal, ese teleférico si estaba en funcionamiento.
Pero Poket ya se empezaba a decantar otra vez por el Metro-Alpin. Argumentaba que así tal vez podíamos hacer mas de un pico, pero yo como siempre le respondía que mejor hacer uno “con do cojone” y dejar el Metro para Bilbau, que para eso es el más grande del mundo....
Que pena no haber traido el equipo.....
Ufffff.... ya te digo.....
Un vistazo a Saas Fee con el Weissmies (4017 m) al fondo.
Bueno y ahora a rememorar mis tiempos de pali.....
Joder, si no se me ha olvidado...
Evo Nasarro corrobora con sus risas que no hace falta unos skies para disfrutar como enanos....
Al lorus con las polainas caseras.....
Si es que con un poco de cinta americana y un poco de imaginación, puedes hacer funcionar un teleférico...., es lo que tenemos la generación que crecimos viendo a Mac Giver...
Bajando las marmotas salen a saludarnos....
Se acercan mucho, tal vez demasiado, no nos temen y creo que están esperando a que les demos algo de comer..... las pobres se están convirtiendo en unas palomas de ciudad.
A la noche bajamos al valle para dormir, buscar un sitio un poco discreto para aparcar la frego, cenar algo, discutir por donde íbamos a atacar la cumbre (Poket se salió con la suya) y para el catre.
Al día siguiente un pequeño madrugón para desayunar, ponernos la indumentaria y a las 8:00 como un clavo para coger el Metro-Alpin.
Unos minutos mas tarde cuando salíamos del agujero....
La luz y la montaña se abrió ante nosotros....
Según nos alejábamos de la estación, como imponía la jodia...
Sobre todo a la hora de ponernos en la trayectoria de los enormes seracs....
Llegaba el momento de encordarse.
Al fondo el Metro-Alpin
Según avanzábamos descubríamos que la zona estaba mas expuesta a grietas que la ascensión al Breithorn.
Estas no asustaban......
Asustaban las que no se veían pero seguro que había.
Menos mal que en esta época del año a esta altura queda mucha nieve del invierno y el sol no reblandece la nieve como en cotas más bajas.
Un tentempié con el pico a la vista.
Parece que ya hemos pasado la zona mas expuesta, pero no bajamos la guardia porque insisto que las peligrosas son las grietas que no se ven.
Poket contemplando las vistas que el collado nos regalaba.
Impresionantes el Breithorn y el Matterhorn....
Animo que ya queda poco....!!!!
Hasta que después de un par de horas.... la cumbre era nuestra...!!!!
Una cumbre solitaria y mucho más incomoda que la del Breithorn debido a sus abismos y estrechez, pero no por ello menos acojonante..., no había mas que echar un vistazo a nuestro alrededor.
- El Alphubel (4206 m), el Taschhorn (4490 m) y el Dom (4545 m).
- En esta por el gran numero de ellas y la dificultad de distinguirlas por la lejanía, las identifico en la foto
- En el Strahlhorn (4190 m) la eskiada era evidente y muy muy apetecible.... Nos la apuntamos.