Cuantos de nosotros no habremos sufrido días y días de esquí con unas botas que nos machacaban los pies y hacían del esquí un suplicio mas que un placer, vamos a ver como podemos solucionar este tipo de problemas!
Hace relativamente poco Crisy escribió un reportaje exhaustivo sobre los diferentes mecanismos de ajuste que poseen hoy en día las botas de esquí, pero mas allá de eso hoy me gustaría comentar ciertos aspectos que pasamos por alto y son , muchas veces, indispensables si queremos que las botas se adapten bien a la morfología de nuestros pies...
Las botas son el elemento mas personal de los que conforman el material “duro” de esquí alpino y el único punto de unión entre nosotros y los esquís. Deben adecuarse tanto a la forma de nuestro pie como a nuestro nivel técnico y físico, para elegirlas hemos comentado muchas veces que es indispensable probarse modelos y marcas hasta hartarnos, comprobar el ancho de la horma, el alto del empeine, la dureza, las prestaciones... pero que pasa cuando al cabo de un tiempo nos damos cuenta que quizá no escogimos bien? Y si el botín se ha dado de si y ahora no nos ajustan bien? Y si nos presionan demasiado en cierto punto, o resulta que la bota que elegimos por ser de máximas prestaciones ahora nos hace pasar un calvario cada jornada de esquí? Pues vamos a ver si es solucionable!
El caso, y lo que de hecho me gustaría que cambiase con este reportaje, es que tenemos tendencia a ver la bota como algo que una vez comprado no se puede modificar o variar y, en mucha medida, nos equivocamos, podemos aplicar mil y una técnicas para hacer que una bota sea un poco mas blanda, mas dura, mas ancha, no presione en cierto sitio o ajuste mas en algún otro...
Vayamos por partes:
Mi bota es demasiado dura:
Ahí antes de nada debo comentar que esta no es una medida aplicable a TODAS las botas pero si a la mayor parte, especialmente las de gama alta o competición.
El truco consiste en que las botas generalmente están formadas por dos o incluso tres piezas de plástico, y la unión entre la caña (la parte que envuelve la pierna) y la parte que envuelve el pie suele estar fijada además de por los tobillos lateralmente, por uno o dos remaches en la parte posterior, por encima del talón de aquiles, estos remaches pueden quitarse para hacer la bota flexionar con mas facilidad, este proceso no altera en manera alguno el resto de comportamientos de la bota ni la sujeción del pie y es muy fácil de llevar a cabo (basta con una llave allen normalmente).
Otra manera de hacer una bota mas flexible es mediante dos aberturas (cortes) que haremos (mejor dicho que nos harán en un taller...) en la parte de carcasa que envuelve el pie, estos dos cortes serán paralelos a la abertura central gracias a la cual metemos el pie y irán desde la parte superior de esta pieza hasta mas o menos la unión de las espinillas con los pies, para evitar que se abran mas de la cuenta con el uso de la bota les haremos un agujero con una pequeña broca al final, de modo que estas nuevas aberturas acaben de una manera “limpia”.
Este procedimiento básicamente hace lo mismo que quitar remaches pero de una manera mas exagerada, modifica la unión y morfología de las piezas que forman la bota de manera que sea mas fácil flexionar el tobillo...
(N d R- Ojo con hacer este último procedimiento si no estamos seguros de que realmente lo necesitamos puesto que no es reversible, al contrario del anterior, asi que pensaos muy bien si es lo que buscáis antes de echarle mano!)
Mi bota es demasiado blanda:
El proceso contrario para endurecer la bota ya es un poco mas complicado y recomiendo q os lo hagan en un taller, se trata de añadir un remache a la bota en su parte posterior (dependera tambien de si la bota tiene remaches y cuantos, si solo tiene uno igual se puede añadir otro, si tiene dos o mas...el tema se complica), para ello se debera perforar el plastico con una broca fina (debe hacerse muy bien para que el plastico no se raje) y se añadirá un remache que incrementara la union entre las dos piezas.
La bota me “baila”:
Esto suele deberse a que el botín se ha dado o a que compramos la bota demasiado grande (tema bastante frecuente...) y con el tiempo aun cerrándola al máximo de presión no nos ajusta bien.
Hay diferentes soluciones para este problema según el caso: si el problema es que la bota no nos ajusta a nivel general, en ninguna zona (no es q sea demasiado ancha solamente) la más fácil es añadir una plantilla gruesa dentro de la bota, debajo del botín, esto disminuirá el espacio dentro de la bota y nos dará la impresión de que la bota ahora es mas pequeña, esta solución por eso, no esta especialmente indicada para aquellos que tengan el empeine muy alto, ya que al meter una plantilla debajo del botín puede ser que la bota les presione mas en esta zona...
Otra solución muy fácil para estos casos es comprar en una tienda especializada una funda de un material parecido al neopreno que venden algunas marcas (Salomón por ejemplo) que realiza la misma función, recubre el botín por fuera de manera que disminuye el espacio interior de la bota (por decirlo de alguna manera).
Si el problema es mas concreto, la bota es demasiado ancha lateralmente, o no nos coge bien la zona del tobillo por ejemplo, la solución ideal es recortar una pieza de gomaespuma o neopreno o algún material similar (en los talleres de reparación de esquís usan una espuma parecida pero con un adhesivo en una de las superficies, como una pegatina vaya) de unos 2 milímetros de grosor, con la forma de la zona del botín que queramos recubrir (donde el pie nos baila) y pegarlo encima de este.
Lo mejor para hacer pruebas (y hablo por experiencia) es probar diferentes grosores y formas hasta que damos con la que realmente soluciona el problema, y, por supuesto, no uséis pegamento para fijar las piezas si no estáis realmente muy seguros de lo que hacéis, lo mejor es fijarlas con cinta americana para que no se desplacen ni se arruguen o gasten... y si no funciona pues se quita, se pone en otro sitio o con otra forma y san se acabó!
La bota me presiona demasiado en una zona:
Es un problema muy común, muchos esquiadores tenemos bultos o pequeñas “deformaciones” en uno o en los dos pies y esto hace q una bota pueda sentarnos como un guante y la otra hacernos un daño increíble (en mi caso la izquierda) o simplemente tenemos el empèine muy alto o el pie muy ancho en determinada zona.
Para esto también hay varias soluciones, pero recomiendo encarecidamente que en cualquiera de los casos, os lo hagan en un taller especializado, ya que aquí si podemos fastidiar las botas si se nos va la mano o no tenemos el material adecuado...
Es también muy importante localizar de manera muy exacta el sitio en el que debemos intervenir, y esto es mas fácil si lo hacemos con el botín fuera de la carcasa, de manera que con apretar un poco notaremos cual es la zona dolorida... Si queremos trabajar directamente con la carcasa hay varias maneras, una es pintándonos con un pintalabios o algo parecido la zona del pie afectada y metiéndolo después en la carcasa (sin botín) de manera que quede señalizada la zona de plástico en contacto con la parte pintada del pie. Por último tenemos la opción mas efectiva pero la que menos me gusta por razones q pronto descubriréis: se trata de ponerse las botas con botín, apretarlas y dar pequeños golpes con un martillo o instrumento similar hasta acotar bien la zona dolorida... A que también os gustan mas las otras dos?
Bueno dicho esto vamos con las técnicas de personalización en si:
La primera opción es rebajar el botín en la zona afectada, es decir, cortar con una gillette o un cuter de manera superficial y plana el exterior del botín de manera que vayamos rebajando su grosor poco a poco, dejando cada vez menos capas de tejido... Eso si, nunca hay que llegar hasta la última capa ni el interior del botín, ojo con pasarse!
Otra opción es rebajar el grosor de la carcasa en la zona afectada, para esto usaremos una fresadora (con mucho cuidado) o sino una lija gruesa, esta técnica es en mi opinión la mas “cafre” y hay que ir con mucho cuidado con quien te la aplica, si se hace mal puede dejar la bota muy debilitada en la zona en cuestión...
Y por último, pero sin duda la mejor y mas efectiva, el famoso deformado de la carcasa. Esta técnica contrariamente a lo que mucha gente cree no debilita la bota, no repercute en sus prestaciones (la mayoría de esquiadores profesionales llevan las botas deformadas hasta el punto que están hechas casi a medida), ni es solo aplicable en determinadas zonas, si se hace bien y con los medios adecuados (volvemos al tema de que hay que ir a talleres especializados) es aplicable en cualquier zona de la bota y en diversas medidas y amplitudes, de forma que suele ser muy eficaz con todo este tipo de problemas.
Se trata de aplicar calor a una zona de la bota y así reblandecer el plástico, acto seguido con unos aparatos especiales se le aplica presión a esa zona para dilatarla y deformar así la forma de la bota, es un proceso mas lento y meticuloso que los otros pero da mucho mejor resultado...
Un ultimo comentario sobre este problema en concreto, hay veces que con el tiempo de sufrir esa presión en un punto concreto del pie se nos forma una bulto, este caso tiene además de la deformación de bota otra manera de solucionarse, esta se trata de hacer lo que hemos explicado antes para ajustar mas la bota en una zona (pegar un trozo de gomaespuma y tal y tal...) pero con la particularidad de que en el sitio concreto donde tenemos el bulto haremos un agujero en la gomaespuma, de modo que el bulto quedara “rodeado” por esta, de ese modo conseguiremos separar el bulto de la carcasa y al no presionar directamente sobre el no nos molestará (la presión se centrara en la parte circundante al bulto que al tener la gomaespuma que aumenta el grosor del botín será la que este en contacto directo con la carcasa, mientras q el bulto en si quedara separado del plástico). Esta última técnica la recomiendo encarecidamente en combinación con la deformación si la deformación por si sola no se muestra del todo eficaz... (Si pudieseis ver mi bota izquierda descubriríais que hablo con conocimiento de causa... )
Otros pequeños “trucos”:
Venga para acabar vamos a dar unos cuantos consejos que servirán a todo el mundo para conseguir botas mas personalizadas y con una adaptación optima a nuestros pies.
Primero algo que recomiendo a todo el mundo: existen lo que habitualmente se llama plantillas termoformables, estas básicamente cogen la forma de la planta de nuestro pie, no son especialmente caras y valen la pena, notaremos que el apoyo plantar es mucho mayor (de hecho es total) y eso repercutirá tanto en nuestras sensaciones y apoyos al esquiar como en nuestra comodidad.
Si queremos ir todavía mas allá existen también lo que se llama “botines injectables” son mas completos y mucho mas específicos que los habituales termoformables que vienen de serie con las botas, estos se rellenan con un material que al enfriar se endurece y coge la forma exacta de nuestro pie en todo el botín lo cual hará que la bota nos sujete de manera mucho mas eficiente y por tanto la transmisión de impulsos y la comodidad que notaremos será mucho mayor que con los botines “normales” (los de botines de serie que se pueden moldear suelen coger la forma solo en la parte del tobillo), eso si, aunque son una gozada y se pueden aprovechar para cualquier bota (de modo que si los cuidamos pueden durar mucho tiempo) preparaos a pagar una cantidad entre los 175 y los 200 y pico euros aproximadamente...
Bueno, pues ahora si, para finalizar este reportaje me gustaría decir que aquí he dado algunas soluciones para algunos problemas concretos pero que en general hay mil y una operaciones (o combinación de operaciones) que podemos hacer a una bota para personalizarla y adaptarla a nosotros, si vais a hablar con un profesional del tema os aconsejara específicamente para cada caso cual es la solución mas adecuada y por una pequeña suma os dejará las botas que ni hechas a medida...
Quizá la frase que resume todo esto y que deberíamos tener muy clara es: “La bota debe adaptarse al pie, y no al revés.”, de modo que ya sabéis, no volváis a dejar que una bota os estropee un solo día de esquí!
Hasta pronto!
Sam1980