Las mismas fuentes han señalado que la inversión prevista en la montaña es de unos 60 millones de euros, 36 millones corresponderían al coste de los remontes y el resto, a la construcción de las instalaciones necesarias para los meses de verano.
En esta primera fase la estación tendría su acceso por la población de Betren a través de un telecabina de 8 plazas, que realizaría el trayecto hasta pistas en solamente tres minutos y que funcionaría tanto en invierno como en verano, primavera y otoño. Según el anteproyecto que Fadesa ha presentado al Ayuntamiento de Vielha, los 10 remontes (conforman la primera fase) tendrían una capacidad para transportar hasta 17.000 personas por hora, tratándose así de la estación de más envergadura del Pirineo catalán después de Baqueira Beret.
El anteproyecto contempla que en esta nueva etapa de la Tuca se llegaría hasta la cota 2.550 asegurando así nieve suficiente en todas las pistas. Cabe recordar que en la última etapa de la Tuca antes de cerrar la cota máxima era de 2.072 metros.
El grupo inmobiliario gallego también planea ampliaciones a este dominio esquiable hacia la vertiente de Escunhau y la vertiente del Port de Vielha. Esto convertiría la Tuca en una de las estaciones más grandes de todo el Pirineo, equiparándose en superficie a lo que ocupan los ámbitos de Baqueira, Beret y Orri.
Por lo que respecta a la ampliación hacia el Port de Vielha y en concreto hacia la montaña de Montenero, se prevé un acceso con telecabina desde un punto cercano a la boca norte del túnel de Vielha, donde habría también un aparcamiento.
Puestos de trabajo
El complejo turístico proyectado en la Tuca se prevé que cree cerca de 500 puestos de trabajo, según fuentes cercanas a Fadesa.
Para los meses de verano, se ofertaría en la montaña actividades como rutas a caballo, bicis de montaña, barranquismo, paseos y incluso la posibilidad de bañarse en una piscina en una cota alta.
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