Cerrada la zona de bares de la Folie Douce, los esquiadores suelen enfrentarse a su útimo reto: bajar las pistas notablemente perjudicados por el alcohol. Una turista británica filmó desde el telesilla la situación, que aunque tiene una imagen cómica, el trasfondo podría ser peligroso.
La Folie Douce es sin duda alguna, una de las zonas de aprés-ski más apreciada de los Alpes. Situada en la estación de esquí de Val Thorens, cuenta con varios locales para tomar copas, algunos de ellos situados en las cotas más altas. Están allí desde finales de los '60, y no son pocos los esquiadores que llegan hasta este complejo invernal francés atraido por estos bares de altitud.
El nombre lo dice todo. "La Tierna Locura", como deberiamos decir en español a "La Folie Douce" busca reunir a todos aquellos que buscan divertirse y bailar la música del momento en un entorno idílico rodeado por altas montañas.
Inaugurado en 1969, actualmente La Folie Douce cuenta con nueve 'sucursales' entre Tignes y Val Thorens, siendo el más famoso el que está situado en la cota 2600 de la segunda de estas dos estaciones de esquí. Solo se puede llegar en telesilla, abre a las 10h de la mañana para servir los primeros desayunos, a las 12h cambian a las comidad y es a partir de las 14h cuando comienza el mejor aprés-ski. Eso si, hay que disfrutar cada minuto de música, porque a las 17h se apaga todo.
Otro de los míticos locales donde se pueden ver situaciones parecidas es es en el MooserWirt de St. Anton. El local está situado en mitad de uno de los tramos finales de la pista de vuelta a casa, y cuando cierra muchos cogen sus esquís y se lanzan visíblemente perjudicados.
Un poco ante del cierre es cuando la esquiadora de Val Thorens grabó estas imágenes, que además nos hacen recordar, que estos locales siempre, mejor a pie de pista.