La esquiadora norteamericana Mikaela Shiffrin estaba muy ligada a su padre. Y es que, no solo ejercía de tutor natural, sino que seguía muy de cerca todos sus entrenamientos y competiciones. Cámara de fotos en mano, inmortalizó la mayoría de de los mejores momentos de la corredora estadounidense.
Tanta unión había, que desde la muerte de su padre, Jeff Shiffrin, Mikaela apenas ha podido levantar cabeza. De hecho, aunque en la Copa del Mundo ha logrado las suficientes victorias como para quedarse el Globo de Cristal, de los Juegos Olímpicos se fue con el decepcionante botín de cero medallas, cuando se esperaba que volviese a casa con un mínimo de tres premios colgados al cuello.
Acabada la temporada de Copa del Mundo de esquí alpino, la esquiadora Mikaela Shiffrin ha querido expresar como se siente actualmente, y tratar de explicar que le pasó en los Juegos Olímpicos de Invierno Pekín 2022, donde se salió tres veces de la pista.
En el portal digital The Players Tribune, la joven esquiadora de 27 años detalló en un ensayo extenso y profundamente personal el alcance de su dolor por la pérdida de su padre y cómo todavía esto está presente en su vida diaria.
La dos veces medalla de oro olímpica y múltiple Campeona de la Copa del Mundo de esquí alpino, abordó el tema de su decepcionante participación en Beijing 2022, donde ni siquiera se acercó a una medalla a pesar de competir en todas las disciplinas.
"La gente siempre me pregunta, '¿Qué pasó en Beijing?'. Quieren algún tipo de respuesta. Y realmente no tengo una.
Podría dar la respuesta mediática que siempre doy. Podría poner cara de valiente y decirte algo genérico. Pero la verdad es que… no lo sé.
Son dos minutos de tu vida. Dos minutos, en un día aleatorio. Bajas la pista. Intentas ir rápido. Intentas no cometer errores. A veces, ganas el oro, como lo hice yo. A veces, fallas... como yo lo hice."
Shiffrin dijo que no quería esquiar, comer ni dormir después de la muerte de su padre en un accidente en febrero de 2020, y comparó la pérdida con "una lesión en el alma".
Acaba de ganar el título General de la Copa del Mundo este pasado mes de marzo pese a lo de Pekín, pero asegura que eso no significa que todos sus problemas personales hayan desaparecido repentinamente.
"Comparamos ganar con estar bien, y fallar con no estar bien. La verdad es que no estoy ni bien ni mal. Realmente depende del día, y casi no tiene nada que ver con la rapidez con la que bajé".
"Fuí a su armario y enterré mi cabeza en su ropa. Fue lo primero que hice cuando llegué a casa después de que mi padre falleciera."
Con esta frase comienza el texto, poderoso y sentido que la esquiadora estadounidense Mikaela Shiffrin publicó el jueves en The Players Tribune.
La esquiadora en activo con más títulos del 'circo blanco' relata así el momento en que recibió una llamada de su hermano en febrero de 2020 contándole la terrible noticia: su padre había tenido un grave accidente. En ese momento, Shiffrin estaba de viaje en Italia con su madre.
"Lo último que nos dijeron los médicos antes de subir al avión fue: 'Haremos todo lo posible para mantenerlo con vida hasta que llegues aquí' .
Esa noche todos salieron de la habitación del hospital y me subí a la cama con él. Puse su brazo alrededor de mí. Me quedé allí durante nueve horas, solo para hacerle saber que estaba allí. Apoyé la cabeza en su pecho y aún podía escuchar los latidos de su corazón. Sé que sintió que yo estaba allí con él. Lo sé. »
El objetivo de Mikaela Shiffrin al compartir esta historia, es la de poder ayudar a aquellos que puedan estar pasando por una prueba como la suya. Y viene también motivada por la carta que leyó de un voluntario en un orfanato en Portland.
"Recuerdo que decía: 'Probablemente necesitarás contar historias sobre tu papá que todos habrán escuchado 100 veces, pero está bien. Sigue contándoles.'
Decía: 'Recuerda, el duelo no es un proceso intelectual.
También que: 'Está bien estar enojado con tu papá por dejarte'.
Y que: 'Estás sufriendo tanto como amas.”
Si esa última parte es cierta, entonces tal vez nunca deje de llorar. Y eso también está bien”