Guerrero hizo notar que se trabaja de cara a empezar a comercializar los productos asociados a los dominios de nieve lo antes posible. Según señaló, será la meteorología y el volumen de esquiadores los que marcarán cuantas pistas, remontes y otros servicios entrarán en funcionamiento. De momento, sin embargo, no tienen en cuenta otros factores. Además, aseguró, los dominios se preparan para abrir adoptando todas las medidas de seguridad e higiene necesarias para hacerlo de manera segura con varios protocolos de actuación que se están preparando.
En cuanto a la contratación de personal, la directora de Ski Andorra explicó que precisamente en el curso de esta semana los departamentos de las diversas estaciones están evaluando cuáles son las necesidades que tendrán de cara a la temporada de invierno. Ski Andorra hará llegar al Gobierno cuantos trabajadores los serán necesarios y el ejecutivo establecerá el número de cuotas de trabajadores comunitarios y extracomunitarios.
En este sentido, Grandvalira ya hace más de un mes y medio que empezó a contactar con los empleados que ya han trabajado en las pistas en otras temporadas. A pesar de reconocer las dificultades y complicaciones que puede haber para viajar desde países que no formen parte de la Unión Europea, les pidió en qué situación se encontraban, donde estaban residiendo actualmente y si tendrían la intención de volver a formar parte de la el equipo de la estación si fuera viable.
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