El pasado invierno ya se pudo estrenar la estación de Kolašin 1600, situada en la parte superior de la ya existente Kolašin 1400. De momento los dos dominios esquiables no han estado conectados, pero ya se trabaja en la instalación de un remonte para unirlos físicamente. La inversión aquí ha sido hasta el momento de 17 millones de euros.
En otra parte del país, en Hajla Mountain se ha estado trabajando en la mejora de accesos y ya se ha licitado la instalación de un teleférico. Todo el conjunto recibe una inversión de 9 millones de euros.
Pero si hay un proyecto que el Gobierno de esta joven República tiene muchas esperanzas puestos es en la construcción de dos estaciones en la montaña de Bijelo Polje. Allí ya se está trabajando simultaneamente para levantar los centros invernales de Cmiljača y Žarski. El objetivo es que la próxima temporada puedan empezar a funcionar y recibir esquiadores, y en una segunda fase conectar ambos dominios esquiables.
Esta primera fase que se divide en dos años, se ha centrado en la construcción de los accesos por carretera, aparcamientos y hasta la llegada de la electricidad para hacer funcionar todas las instalaciones. Este invierno Cmiljača de momento solo tendrá 3 kilómetros de pistas. En 2020 deberá estar todo acabado.
La inversión total estimada para acabarlo todo, conexión y remontes incluidos, es de 52 millones de euros. Se espera que para 2022 esté todo listo, aunque han tenido problemas de plazos con los contratistas. En algún caso se ha tenido que cambiar tres veces de empresa.
Finalmente en una localidad llamada Mojkovac se ha proyectado otra estación de esquí que se llamará con toda probabilidad Žarski. Está en fase preliminar, pero se asignarán otros 30 millones de euros para su consecución.
Estas estaciones de esquí se situan en la parte norte del país, y el Gobierno espera que sirva como motor económico para estas poblaciones de montaña a las que todavía no ha llegado del todo el desarrollo que ya están logrando en el sur, con más costa y playas.