Ya sabemos a donde ha ido a parar la nieve que no nos está cayendo en los Pirineos y la mayor parte de la península: la tiene
Whistler-Blackcomb. Allí solo en el mes de diciembre han registrado un total de
384 centímetros, prácticamente lo mismo, o ni eso, que lo que cae en muchas de nuestras estaciones en todo el invierno.
La cifra es para Whistler-Blackcomb todo un
récord para ese mes, que había quedado anclado desde 1994. La marca se ha superado por solo 4 centímetros, pero es mucha nieve de todas formas!. Y eso que las nevadas tardaron en caer por aquellas montañas hasta bien entrado el otoño, tal como recuerdan desde la propia estación canadiense;
"Hemos cerrado un período de vacaciones de navidad fenomenal y tenemos una gran base para seguir la temporada, sobre todo teniendo en cuenta la cantidad nieve que nos sigue cayendo en estos primeros días de enero. Tomó algo de tiempo llegar a esta situación, pero ahora la meteorología no se está relajando”
Y es que efectivamente, si en diciembre ha caído mucha nieve, en estos primeros días de enero parece que la situación va a seguir. Solo en la primera semana de este nuevo año, han registrado
otros 80 centímetros de nieve, una cantidad que sin duda en nuestras estaciones permitiría cambiar radicalmente el panorama, no solo de las pistas, sino de la cara de muchos esquiadores.
Whistler-Blackcomb tiene
todas las pistas abiertas. Porque si algo saben por allí, es retirar la nieve rápidamente para seguir operando las instalaciones pese a las fuertes nevadas. Sí se han tenido que cerrar los accesos en algún momento, pero ahora mismo está todo el mundo disfrutando a tope de las condiciones.
Con todo, en lo que llevan de temporada en Whistler-Blackcomb han registrado ya la friolera de....
624 centímetros de nieve!!! Al paso que van, no sería descabellado que alcanzasen los 10 metros al acabar su temporada de esquí. Y por descontado, es una nieve que les irá muy bien para su glaciar en Blackcomb, operativo durante algunas semanas de verano.