A partir de las ocho de la mañana, los primeros participantes fueron acercándose hasta el village para recoger sus dorsales, justo antes de hacer el reconocimiento del trazado. Con el circuito testeado, sería a las 10h cuando se daría salida a los primeros corredores. Individual pero con salida en paralelo, junto a otro competidor, cada 40 segundos el cronómetro daría luz verde a dos esquiadores con ganas de disfrutar de la aventura de la mítica Era Baishada.
Con la nieve en perfectas condiciones y el sol acompañando la mañana, los participantes saltarían a competir encontrándose primero con un súper gigante en paralelo, entrando después en un kilómetro lanzado y llegando a meta en un slalom gigante.
Cinco categorías de esquí alpino y, también, de snow y telemark, con los corredores repartidos entre U14 y legends. Cada uno de los que ser acercaron hasta el Pla de Beret se llevaron para casa una exclusiva botella Mizu de regalo y más de uno recogió alguna sorpresa en el sorteo final de productos. Y es que tras disfrutar del Stadium con el dorsal puesto, no sólo los más rápidos y ágiles se llevaron un premio para casa, todos los participantes continuaron divirtiéndose en el village: con la música del DJ de fondo y un buen bocadillo de butifarra y una bebida en mano, disfrutaron del sorteo de regalos rodeados de un ambiente único en pistas.
Un año más, la Quattro Era Baishada ha reunido a esquiadores y snowboarders (ay algún telemarkero) de todos los niveles y los ha convencido con su fórmula de carrera open que mezcla diferentes disciplinas. En su búsqueda del esquiador popular más completo ha vuelto a regalar a todos los amantes de la nieve una mañana de competición y diversión en Baqueira Beret.