
Aprovechando la ISPO 2017 que se celebra estos días en Munich, Rossignol y PIQ han querido mostrar sus avances en su esquí inteligente. Si anteriormente un aparato adherido a la tabla nos mostraba los datos, ahora viene todo integrado, de manera que podemos ver los registros en una pantalla LED. El objetivo es mejorar nuestra técnica mientras esquiamos, así como saber datos más de curiosidad como el tiempo real que hemos estado esquiando, los metros verticales acumulados, los ángulos de giro o incluso la velocidad media de la jornada.
El sistema se ha colocado en el modelo Hero Master de Rossignol y de ello se ha encargado la empresa PIQ Robot. Los esquíes funcionan de forma similar al dispositivo que ya comercializan desde 2015 PIQ Robot y Rossignol. En ese caso es una cinta que se ciñe a la bota para recoger el mismo tipo de información y mostrarla en el móvil, mediante la aplicación asociada. La diferencia es que ahora los sensores están integrados en los esquíes en lugar de en un dispositivo externo.
Mientras que el dispositivo externo de monitorización del movimiento durante la práctica del deporte cuesta 198 euros, los esquíes inteligentes todavía no tienen precio ni fecha de lanzamiento, no obstante teniendo en cuenta que los Hero Rossignol cuestan entorno a los 700 euros, pues el precio final no será nada barato.